La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) dio a conocer que la empresa automotriz de origen japonés, Mitsubishi Motors hizo un llamado a sus clientes que posean su vehículo modelo ASX de los años 2014, 2015 y 2016 tras detectar un fallo en el freno de estacionamiento trasero.
En un comunicado indicó que estos vehículos pudieron haber sido ensamblados y equipados con un sistema de freno que al entrar en contacto con el agua, el eje central del freno de estacionamiento provoca un funcionamiento anormal, presentado por la oxidación o inclusive, que a pesar de que el vehículo se encuentre estacionado se pudiera mover.
De acuerdo con la empresa de Mitsubishi Motors, el número de unidades comercializadas hasta el 31 de enero del 2019 de este modelo se estima un total de 6 mil 269, por lo que los clientes que hayan adquirido este automóvil tendrán que ser notificados; todos los vehículos serán inspeccionados gratuitamente y en caso de ser necesario, se hará el cambio completo del módulo del freno de estacionamiento trasero por uno nuevo sin ningún costo.
Sin embargo, el vehículo a través de su número de identificación (VIN) pudiera ser sujeto a revisión, por lo que es posible que el resultado de la evaluación técnica llevada a cabo por la Red de Distribuidores Autorizados Mitsubishi, pueda determinar que no es necesario llevar a cabo reparación o el reemplazo de esta.
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Asimismo, a los consumidores se les hará llegar la información de este proceso por medio de su correo electrónico o a través de la página web de Mitsubishi mediante un desplegado de Acción Preventiva de Servicio (APS), en donde se deberá ingresar el número de serie o el VIN del vehículo para conocer si se encuentra dentro del listado de los autos que posiblemente presenten las fallas.
lpgc