Un aval es una persona física o moral que funciona como referente para asegurar que una deuda será saldada. Esto quiere decir que, si no se cumple con el pago, quien otorgó el préstamo puede exigir al aval que cubra la deuda, incluso puede ejecutar acción legal contra éste.
En resumen, el aval debe hacerse responsable de cubrir la deuda, aunque no haya solicitado ni gastado el préstamo.
¿Por qué solicitan el aval?
Las instituciones financieras que otorgan créditos o préstamos realizan estudio socioeconómicos a la persona que los solicitan para asegurarse que va a cubrir el monto del dinero solicitado, pero en caso de que se detecte una insuficiencia económica o falta de patrimonio como garantía del crédito, entonces se solicita un aval.
¿Me pueden embargar por ser aval?
La respuesta es sí. La ley ampara el pago de la deuda e incluso puede llegar a un embargo en contra del aval, y en caso de que éste carezca de recursos para enfrentar sus obligaciones se procede a retener sus bienes.
Sin embargo, quien fungió como aval puede tomar acciones legales contra el deudor, pero este proceso no garantiza el pago correspondiente, pues el aval accedió a responder con antelación por el deudor en caso de que éste no cumpliera con el pago de la deuda.
Además del embargo y ante el incumplimiento de pago, tanto el deudor como el aval son reportados con una mala nota ante el Buró de Crédito.
¿Qué hacer si te solicitan ser aval?
Antes de tomar una decisión, toma en cuenta lo siguiente:
- Investiga a quién te lo está solicitando. Conoce lo más que puedas de la persona que te pide ser su aval; sin importar si se trata de familiares, amistades o personas conocidas.
- Pregunta sobre el tipo de crédito que van a contratar. Toma en cuenta que la deuda podría llegar a ser tuya.
- Indaga sobre los ingresos de quien serás aval. Asegúrate de que la persona que desea el crédito tenga ingresos estables y no tenga otras deudas.
- Crea un respaldo económico. Recuerda que necesitarás estar preparado o preparada en caso de que tu avalado necesite ayuda con su préstamo, por lo que es mejor tener un respaldo en caso de que tengas que responder por la deuda.
- Mantén comunicación con el acreditado. Tener una buena comunicación y acercamiento con la persona acreditada te asegura estar al pendiente de los pagos que se hacen, o se dejan de hacer, para que no te tomen por sorpresa.
ZNR