La extorsión, el robo o asalto de mercancía, dinero, insumos o bienes, son los delitos con mayor incidencia en los comercios del país, lo que ha significado un problema para sus operaciones.
De acuerdo con el resultado de la Encuesta Nacional de Victimización de Empresas (ENVE) 2022, el número de delitos representa una tasa de concentración de 2.4 casos por unidad económica víctima.
Durante 2021, en México ocurrieron 2.9 millones de delitos, que afectaron a 1.2 millones de negocios, un 24.6 por ciento de las empresas.
Se estima que el costo total a consecuencia de la inseguridad y el delito en unidades económicas representó un monto de 120.2 mil millones de pesos, es decir, 0.67 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).
En el sector Comercio, 27.8 por ciento fue víctima de algún delito; 19.4 por ciento del sector Industria; en Servicios, el porcentaje fue 22.7 por ciento.
Por tamaño de empresa, 45.9 por ciento de las unidades económicas grandes fue víctima de algún delito; de las medianas, el porcentaje fue 46.9 por ciento;de las pequeñas, 38.2 por ciento; y de las micro, 23.7 por ciento.
Extorsiones
En se cometieron 829 mil delitos de extorsión. De estos, 67.6 mil correspondieron a delitos de extorsión en la calle, en el establecimiento, o cobro de piso. En 44.8 por ciento de los casos se pagó dicha extorsión, porcentaje superior al de 2019, de 44.6.
“La extorsión fue el delito más frecuente, agrupando cerca de 29 por ciento del total de los delitos; después, con cerca de 20 por ciento, el robo o asalto de mercancía, dinero, insumo o bienes”, señaló el director general de Estadísticas de Gobierno, Seguridad Pública y Justicia del Inegi, Oscar Jaimes.
Explicó que la consecuencia principal de todo este contexto tiene que ver directamente con el cambio que realizan sus propietarios o quienes las administran en su vida diaria. Una de cada cinco unidades económicas redujo los horarios de producción o de atención al público; además, dejaron de manejar efectivo y 15 por ciento de las empresas canceló inversiones.
“Y se generan otras consecuencias como es una afectación al desarrollo económico local, al empleo en las localidades e, incluso, a la reputación de las entidades o en el nivel macro, la reputación a nivel nacional de la posibilidad de hacer negocios en nuestro en nuestro país”, alertó.
Comerciantes no denuncian
El Inegi destacó que alrededor de 91.5 por ciento de los delitos no se denuncia. De los que sí llegaron a denuncia, 74.4 por ciento llegó al inicio de una carpeta de investigación en el ministerio público o Fiscalía estatal. Del total de delitos, se inició carpeta de investigación en 8.5 por ciento de los casos.
Entre las razones para que las unidades económicas no denunciaran el delito ante las autoridades destacaron: pérdida de tiempo, con 37.5 por ciento; y no tenía pruebas, con 18.1 por ciento, dentro de las causas atribuibles a la autoridad y otras causas, respectivamente.
COG