Especialistas del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP) y de la asociación civil El Poder del Consumidor defendieron el etiquetado frontal de los productos y aseguraron que, en tres años que lleva implementado, estos han subido los precios de algunos alimentos y obligaron a que el 56 por ciento cambiaran su formulación a otra más saludable.
En la conferencia de prensa Vigor en el Etiquetado, la investigadora del INSP, Alejandra Contreras, indicó que, en los últimos tres años, se llevaron a cabo diferentes estudios en internacionales, donde se concluyó que el 56 por ciento de los productos cambiaron su fórmula con el objetivo de disminuir el número de sellos en sus empaques.
De acuerdo con la investigadora, una de las empresas que tomó estas medidas es Bimbo, la cual reformuló el 82 por ciento de su portafolio de bollería: su pan integral tenía 250 miligramos de sodio y 4.4 gramos de azúcar, pero en 2022 cambiaron la fórmula para bajar dos sellos, llegando a tener ahora sólo 181 miligramos de sodio y 3.6 gramos de azúcar.
“Sobre el efecto en precios hay un estudio que es bastante nuevo, pero detalla algo interesante: los productos que tienen dos sellos se están abaratando y los que tienen tres sellos o más se están encareciendo, se está comparando desde el 2018, entonces se está considerando la inflación”; dijo.
Alejandra Contreras destacó que los adultos mexicanos sí utilizan el etiquetado de los productos, pues el 65 por ciento de los padres de familia encuestados aseguraron que lo consultan; además, el 80 por ciento afirmó que dejaron de comprar productos o disminuyó el consumo dependiendo del número de sellos en el empaque.
Explicó que los productos que más se han dejado de comprar por las familias mexicanas desde la implementación de los sellos en los productos son los refrescos y bebidas azucaradas.
Según el estudio, el 58 por ciento de los padres de familia encuestados afirmaron que sus hijos comprenden qué significa el etiquetado; sin embargo, apenas el 17 por ciento de las personas encuestadas indicaron que esta medida no les ha resultado útil.
La investigadora de El Poder del Consumidor, Paulina Magaña, añadió que un estudio del Instituto Nacional de Salud Pública indicó que si esta medida sigue, en cinco años más, se reducirán un millón 300 mil casos de obesidad en México, lo que reflejaría una reducción de mil 800 millones de dólares en impuestos.
KT