Durante las últimas semanas se ha popularizado el concepto de tiempo compartido y el cómo algunas personas lo han utilizado para cometer fraudes; sin embargo, no todos tienen claro a qué se refiere este término relacionado al sector turístico. Por ello, aquí te explicamos.
¿Qué es un tiempo compartido?
De acuerdo con la Asociación Mexicana de Desarrolladores Turísticos (Amdetur), un tiempo compartido se refiere al derecho de una persona o grupo de personas que usan por semanas o períodos específicos un sitio de hospedaje y diversión.
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En otras palabras, según la Amdetur, un tiempo compartido es la compra anticipada de una vacación por un periodo determinado de tiempo, que llegar inclusive a varios años.
“Es importante entender que la propiedad vacacional es una comodidad que es comprada para ser disfrutada y utilizada a través de los años. La propiedad de un tiempo compartido es muy similar a la propiedad de un condominio excepto que tus derechos de uso están limitados a cierta semana o intervalos durante el año”.
Para un tiempo compartido existen diversas modalidades: uno de ellos es el de semana y unidad fija, en el que el comprador recibe un contrato que le permite el uso del condominio en una semana determinada del año.
Mientras, el segundo concepto es de derecho de uso, donde el comprador obtiene el uso y acceso en uno o más desarrollos turísticos durante un número específico de años, que generalmente están entre los cinco y 20. Al concluir el plazo, el título regresa a la empresa.
¿Cómo evitar fraudes en tiempos compartidos?
La Fematur recomendó que, para evitar un fraude relacionado a los tiempos compartidos, no se debe considerar contratar empresas que ofrezcan los servicios a través de redes sociales, correo electrónico o de manera telefónica.
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Posteriormente, según la asociación, se debe verificar que el contrato esté verificado en la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), lo cual se puede hacer haciendo clic aquí.
Igualmente señaló que es recomendable que, si se contrata el tiempo compartido con algún proveedor en específico, se consulte el Buró Comercial de la Profeco para conocer su comportamiento comercial.
La Fematur recomendó no contratar por impulso, sino evaluar la conveniencia de adquirir el servicio, además de leer detalladamente el documento antes de firmarlo, para revisar claramente las cuotas a cobrar, los tiempos de estadías y sobre todo, ver si hay penalizaciones por cancelar el contrato.
KT