Keith McNally, dueño del restaurante Balthazar de Nueva York, compartió una publicación en la que acusa a James Corden, conductor del programa “Carpool Karaoke”, de maltratar a los empleados del lugar.
“James Corden es un comediante enormemente dotado, pero como persona es un cretino. Y el cliente más tirano que ha tenido el equipo de Balthazar desde que el restaurante abrió hace 25 años”, escribió el empresario de 77 años.
De acuerdo con el post de McNally, el famoso perdió la cordura cuando uno de los platillos que pidió su esposa no fue servido como ella lo deseaba.
“Fue entonces cuando James Corden comenzó a gritar como loco al servidor: "¡No puedes hacer tu trabajo! ¡No puedes hacer tu trabajo! ¡Tal vez debería ir a la cocina y cocinar la tortilla yo mismo!"", relató el dueño del restaurante.
El empresario agregó que el presentador estaba vetado de su restaurante.
“No suelo ponerle 86 a un cliente [una antigua denominación gastronómica en Estados Unidos para referirse a alguien que tiene vetado el ingreso a un restaurante], pero hoy le he puesto 86 a Corden. No fue gracioso”, agregó.
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Sin embargo, hace un par de horas, McNally publicó otro texto en el que señalaba que James Corden le había pedido disculpas, por lo que podría seguir asistiendo al restaurante.
“James Corden acaba de llamarme y se disculpó profusamente (…) cualquiera lo suficientemente magnánimo como para disculparse con un holgazán como yo (y mi personal) no merece ser expulsado de ningún lado (…) Todo está perdonado”, puntualizó.
Como era de esperarse, los internautas no tardaron en dejar sus comentarios en los posts del empresario, donde aplaudieron su actitud, al darle una segunda oportunidad al presentador.
dgv