Hace unos días,la influencer y estrella de Only Fans, Karely Ruiz, se hizo tendencia cuando compartió en redes su visita a un refugio para perros en Monterrey, Nuevo León. La influencer dejo ver una vez más su lado más humano, ayudando de manera desinteresada a nobles causas.
Fue a través de su cuenta de Instagram y Tiktok donde compartió vídeos y fotografías de su visita y donde se le puede ver conviviendo con los lomitos, los cuales se encuentran en una situación muy triste. Incluso, luego de su visita, la influencer no pudo contenerse las lágrimas y confeso sentirse muy triste, en particular por el caso de dos perritos; uno que no tenía ojos y otro que tenía problemas en sus patitas traseras.
Además de estar compartiendo tiempo con los perritos, la influencer también donó costales de croquetas a las encargadas del lugar, de esta forma, los perritos estarían cubiertos de alimento por un tiempo.
Su noble gesto, tuvo muchas reacciones positivas de parte de los usuarios, quienes aplaudieron las acciones de la influencer, sin embargo, hubo quienes, en lugar de fijarse en las buenas acciones, criticaron el hecho de que no adoptara a ninguno de los perritos.
Usuarios en redes comenzaron a criticar su labor, cuestionándole la ayuda que brindó, ya que para muchos no fue suficiente la visita hacia el albergue, sino que también veían necesario que adoptara un lomito. Ante estas recriminaciones, la influencer no se quedó callada, y firmemente contesto a quienes la atacaban, las razones por las cuales no adoptaba.
"Si no adopto es por qué no tengo tiempo bebes, veo mil comentarios así de que, si muy acá ayudando por qué no adoptas, ¿para qué adoptar a un perrito si no le podré dar la atención que se merece? ¿Adoptarlo para abandonarlo? Naaaaa mejor apoyo de diferente manera. Son buenos para hablar, pero ni hacen ni vrgsss", comento la influencer de Only Fans
La contestación de la influencer dejó en claro que es consciente de la importancia del amor y la atención que debe recibir cualquier mascota, por lo que no dudó en contestar tajantemente a sus detractores.