Tras una semana de su cirugía para eliminar los polímeros que previamente le habían inyectado en los glúteos, Yared Licona, más conocida como 'La Wanders Lover', ha regresado a la escena pública. Sin embargo, el proceso no fue simple: la intervención implicó la amputación de parte de su cuerpo.
En una reciente entrevista publicada en YouTube por Berenice Ortíz el 4 de marzo, 'La Wanders Lover' compartió los desafíos que enfrentó en su salud después de ser diagnosticada con el síndrome de ASIA, provocado por los polímeros inyectados sin su consentimiento durante una cirugía estética.
Después de considerar varias opciones sugeridas por los médicos, incluyendo el uso de implantes, decidió consultar con varios especialistas hasta encontrar al médico adecuado, quien logró eliminar un 70% de la sustancia inyectada. A pesar de este esfuerzo, la amputación de una parte de la zona afectada fue inevitable.
"Me amputaron nada más la parte de arriba que fueron alrededor de cuatro dedos, de ambos glúteos, es por eso por lo que sí estoy media dolida con eso, porque sí fue una amputación, fue un cacho de carne que te quitaron, se ve el hoyo. Yo vi la cirugía, me la enseñaron, y sí duele ver que tu cuerpo pase por esto", declaró.
¿Qué le pasó a La Wanders Lover?
Wanders Lover abrió su corazón para compartir la difícil situación de salud que está atravesando como consecuencia de una serie de cirugías estéticas fallidas, las cuales incluso resultaron en la amputación de una parte de su cuerpo.
En un valiente acto de transparencia, Yared Licona, conocido por su participación en el programa "Guerra de Chistes" de Telehit, utilizó sus redes sociales para exponer la pesadilla que ha vivido en los últimos meses. Tras someterse a una operación estética con la intención de mejorar su apariencia, un médico le inyectó polímeros en los glúteos, desencadenando el Síndrome de Asia, un trastorno autoinmune e inflamatorio causado por el uso indiscriminado de sustancias estéticas.
En un sincero mensaje compartido en Instagram, Wanders Lover expresó su preocupación por la creciente obsesión con la apariencia física, que lleva a las personas a arriesgar su vida en busca de la perfección estética. Confesó haber confiado en un médico para realizar ajustes en su cuerpo, sin imaginar las graves consecuencias que enfrentaría.
La Wanders Lover explicó que, lamentablemente, no puede identificar al médico responsable de la inyección de polímeros en sus glúteos, ya que ha pasado por numerosas cirugías estéticas desde una edad temprana en un esfuerzo por perfeccionar su figura. Reconoció la controversia que ha generado su decisión de no revelar el nombre del cirujano, explicando que, más que una elección, se trata de una situación en la que realmente desconoce la identidad del profesional responsable.
GB