La actual pareja del futbolista Gerard Piqué, Clara Chía ha puesto una denuncia al fotoperiodista Jordi Martín por los delitos de acoso y lesiones, acciones provocadas a causa de la persecución a la que se vio sometida por este sujeto, y por lo cual, esta mantiene los cargos por los que lo denunció ante los Mossos d’Esquadra el pasado 10 de mayo.
Jordi Martín se enfrenta a penas de tres meses a los dos años de prisión por acoso y de tres meses a tres años de prisión por lesiones producidos en ámbitos de la intimidad. El magistrado considera indicios de criminalidad fundamentados tanto en una persecución insistente y continua. El juez a cargo de la causa, ha notificado a las partes el cierre de la instrucción y ha solicitado tanto a la denunciante como a la Fiscalía que presenten sus escritos de acusación.
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El instructor decretó la orden de alejamiento del fotoperiodista de la denunciante cuyo plazo de tres meses concluyó el pasado miércoles, siendo reiteración y alteración de la vida ordinaria, así como el sufrimiento ocasionado los motivos. El magistrado rechazó, tras dictarse la resolución que acuerda continuar el procedimiento para juicio, no es previsible que el denunciado retome una práctica que ya le ha llevado hasta aquí. Esta siendo la primera vez que se juzga a un paparazzi por estos delitos en España.
En caso de ser condenado, Jordi Martín se enfrentaría a penas que van de los tres meses a los dos años de prisión en el caso del delito de acoso –o, en su defecto, a una multa de 6 a 24 meses– y de 3 meses a 3 años de prisión o multa de 6 a 12 meses en el caso del delito de lesiones.
Jordi fue el autor de las primeras fotos tanto de la pareja, como de Clara Chía en solitario, que se publicaron en varios medios españoles y extranjeros. El paparazi basa su defensa en la libertad de prensa y el interés.
De acuerdo con el magistrado, Martín no tiene legitimidad para invadir ámbitos privados, como la boda de un amigo de Piqué el año pasado o el estacionamiento privado de la finca donde está domiciliada Kosmos, la empresa del exjugador y donde Chía trabaja. Además, de haber realizado persecuciones en coche a la denunciante que ponían en peligro la seguridad de esta, quien no habría hecho ningún tipo de movimiento que hiciera pensar que querría dejar atrás su vida privada.
El magistrado también refiere en su notificación de cierre de instrucción las persecuciones que Martín realizó en un vehículo a gran velocidad a la denunciante, que llegaron a entorpecer el paso y poner en riesgo su seguridad. Así como ser colaborador en varios espacios televisivos y hacer públicos los perfiles en las redes sociales de la joven, a sabiendas de que eso provocaría numerosas interacciones hostiles hacia ella por la relación sentimental que mantenía con Gerard Piqué tras su separación de Shakira, de la que el procesado se declara admirador.
Pese a que el exfutbolista decidió apartarse de la causa, el escrito también recoge la existencia de incidentes con Martín en el período de la investigación, en solitario o en compañía de sus dos hijos.