Paul Stanley, quien se convirtió en el quinto eliminado de La Casa de los Famosos, tuvo que ponerse al tanto de lo sucedido en el exterior, entre ellos la noticia de la muerte de su perrito.
Y es que, durante su estancia en el reality, su novia tuvo que tomar la decisión de dormir a uno de sus perritos que pasaba por problemas graves de saludo a causa de su avanzada edad.
"Mi CheChe te voy a extrañar con todo mi. Gracias por todo el amor que nos regalaste. Tus hermanos, mamá y yo, somos muy afortunados de tenerte en nuestras vidas. Te amamos", escribieron desde la cuenta de Instagram de Stanley.
En una de sus últimas publicaciones Paul Stanley, el conductor compartió la manera en la que fue recibido en su hogar y la tristeza que le dio al no ver a su perrito después de su fallecimiento.
“Así me recibieron los bebés de la casa y triste porque cheche se nos fue”, escribió.
Como era de esperarse, en la publicación se tapizó de mensajes de apoyo hacia el conductor de Hoy, quienes se alegraron de su salida del reality show.
“Yo vote por ti Paul. Integridad es saber que a veces perder es ganar”, “Paul la verdad me gusta más que estas afuera eres un ser humano muy bello y con mucha luz y en esa casa solo te estaban intoxicando, Dios te bendice”, “Es increíble, es como si te estuviera dando las condolencias... definitivamente la mejor compañía, los mejores y más leales amigos”, fueron algunos de los comentarios.
¿De qué murió el perrito de Paul Stanley?
A traves de sus redes sociales, Joely Bernal, novia de Paul Stanley reveló las causas que la orillaron a tomar la decisión de dormir a su perro Chester debido a que presentó problemas graves de salud.
"El día que tanto temía pero sabía que iba a llegar; pues ya llegó. Chester tenía casi 16 años (los cumplía el 30 de Octubre). Por su edad ya tenía problemas degenerativas: soplo en el corazón, problema renal, infección en los ojos, no podía caminar por sus cartílagos, no quería comer y me bajó mucho de peso", publicó.
Aseguró que no podía ver que su perrito estuviera sufriendo, y lamentó haber tomado esta decisión sin la opinión de Paul Stanley.
"Hoy dije; si veo que no come nada lo llevaré al veterinario, veo que me dicen y de ahí determinar que será la mejor decisión. Y pues sí; cuando todos los médicos me dijeron que ya de aquí iba a empeorar; con el corazón roto tuve que tomar la decisión de dormirlo y en 3 días tener sus cenizas en casa.
"Ya está más tranquilo y descansando en paz. Fue un gran perro; mi primer perro. Un compañero incondicional y bueno. Y siento que se fue feliz y tranquilo de todo lo que vivió con nosotros. No quise tomar esta decisión sola sin Paul, pero ya era hora. Lo recordaremos para siempre. Gracias a todos por su cariño incondicional para nuestro Chester".
gb