ESPECIAL.- Acapulco, emblemático paraíso para Luis Miguel en los década de los 80’s y los 90’s, así era la casa del cantante, un terreno de 36 mil metros cuadrados en la playa ‘buenfil’, en una zona exclusiva de zona diamante, cuando aún no era una costa popular. Un lugar que vivió romances, fiestas y mucha soledad.
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Un grupo de jóvenes irrumpieron la propiedad a finales de diciembre del 2020, documentando los rincones desde la cocina hasta la suite principal mostrando el deterioro y el abandono del lugar, a raíz de este suceso se reforzó la seguridad.
Además de tener un cuidador, aplicaron estructuras de madera en las puertas principales que evitan el ingreso, únicamente dejando libre las habitaciones sin acceso a su interior.
A partir del 2009 el cantante frecuentaba Miami o Los Ángeles, dejando atrás el puerto de Acapulco. Finalmente en el 2013 la mansión fue vendida a la inmobiliaria del empresario Jaime Camil por 8.8 millones de dólares.
Alfombras viejas, basura, humedad, ventanas rotas es lo que queda no solo de una casa, sino de una época que marcó la vida de Luis Miguel.
SHC