ESPECIAL.- Se terminó el rodaje de la octava y última temporada de Game of Thrones y, con ello, sus actores ya comenzaron a despedirse de sus entrañables personajes.
Emilia Clarke, quien interpreta a Daenerys Targaryen, se tatuó una parte de su cuerpo para inmortalizar su título como la Madre de los Dragones.
"¡¡¡MOD 4 LYFE!!! (…) Mamá no va a olvidar nunca a sus bebés", escribió la actriz junto a una imagen del tatuaje de sus tres dragones.
La estrella no es la única que se ha tatuado en homenaje a la serie de HBO, pues Sophie Turner, quien da vida a Sansa Stark, decidió inmortalizarse el emblema de la casa de su personaje.
Por su parte, Maisie Williams se realizó uno en honor al octavo episodio de la sexta temporada de la producción, uno de los más importantes para ella.
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