Yolanda Andrade reveló en una entrevista con Isabel Lascuráin los oscuros momentos que ha vivido derivados de su pasada adicción a las bebidas alcohólicas y las sustancias que consumía.
Y es que, en su juventud, la presentadora de televisión llegó a beber dos botellas de vodka o whisky al día, lo que llegaba a “combinar también con cocaína”.
Andrade declaró que en estas jornadas se hacía de acompañar de amigos que “le hacían segunda” en el consumo, tal es el caso de Julio Cesar Chávez, un gran amigo Yolanda Andrade, y quien también ha hablado abiertamente de su lucha contra las adicciones.
"Nos encerrábamos en el baño y ahí durábamos mucho tiempo. Nos amanecía y otra vez, con una grabadora y escuchábamos a Mijares (la canción) 'Uno entre mil', ¡cómo la ponía!, hasta que se nos rayaba el disco. Llorábamos y hablábamos de lo mismo que hablan los borrachos, lo mismo. Era una tristeza que tal vez teníamos los dos, pero la única alegría era que estábamos los dos encerrados en un baño tomando con una grabadora", explicó en entrevista con Isabel Lascuráin para su canal de YouTube.
Recordó que, en aquellos días de gloria para el boxeador mexicano, a sus encuentros acudían grandes personalidades del mundo del entretenimiento y empresarial para felicitarlo, sin embargo, recordó que Chávez no le causaba demasiada emoción ni interés el saludarlos.
“Me acuerdo perfecto que fue Madonna a saludarlo y me dijo: ‘No, yo no quiero conocer a esa vieja porque sale en unas fotos bichi (desnuda)”, recordó respecto al pugilista que prefería celebrar con sus allegados y amigos, en vez de atender a los famosos, como Robert de Niro, que acudían a felicitarlo.
“Estaba Robert De Niro y todos lo querían saludar, (el boxeador le dijo): ‘No, viene mi compadre el Coque’ (...) Nos encerrábamos en el baño y ahí durábamos mucho tiempo, nos amanecía y otra vez, con una grabadora y escuchábamos a Mijares, Uno entre mil (la canción), ¡cómo la ponía! Hasta que se nos rayaba el disco y llorábamos y platicábamos lo mismo que los borrachos, que repiten lo mismo y lo mismo”, rememoró la conductora con cierto aire de nostalgia.
Finalmente, Yolanda Andrade aseguró que su abuso de la cocaína estaba ligado a su deseo por seguir embriagándose, pues con ese efecto podía continuar sus desenfrenadas noches de fiesta. “Para seguir la peda, pues uno se mete coca para seguirle”.