La expresidenta surcoreana Park Geun-hye fue condenada por un tribunal de Seúl a 24 años de cárcel por corrupción, a un año de su destitución y luego de más de 10 meses de juicio abierto.
La primera mujer elegida presidenta de Corea del Sur fue destituida y detenida en marzo de 2017.
Park Geun-hye fue declarada culpable de corrupción, abuso de poder y coerción por el tribunal del distrito central de Seúl, que le impuso además una multa de 18.000 millones de wones (17 millones de dólares).
El juez Kim Se-yoon afirmó que Park había forzado a empresas surcoreanas a pagar decenas de millones de wones a dos fundaciones controladas por su "amiga de 40 años" Choi Soon-sil.
"La acusada utilizó ilegalmente su autoridad presidencial a la demanda de Choi para obligar a las empresas a dar dinero a las fundaciones. Las empresas fueron obligadas a dar sumas importantes de dinero y la acusada dejó a Choi controlar las fundaciones cuando no tenía derecho a hacerlo", dijo.
La hija mayor del dictador militar Park Chung-hee, accedió a la Presidencia en 2013 presentándose como la incorruptible "hija de la nación".