Una emergencia se registró en el Aeropuerto de Van Nuys (VNY), en California, luego de que una aeronave tipo Cessna C172 se viera involucrada en un accidente previo a despegar, derivando en el cierre temporal de la pista principal.
El aeropuerto, considerado uno de los centros de aviación general más activos de Estados Unidos, mantuvo protocolos de seguridad reforzados mientras cuerpos de emergencia y autoridades federales esclarecían las causas del hecho.
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¿Cómo ocurrió el accidente con la aeronave?
De acuerdo con los primeros reportes emitidos por la Administración Federal de Aviación (FAA), el avión monomotor presentó una falla atribuida aparentemente a un error humano cuando intentaba iniciar su trayecto de despegue.
La aeronave nunca logró elevarse ya que, al desplazarse por la pista, el tren de aterrizaje delantero colapsó provocando que el fuselaje se precipitara de forma abrupta contra el pavimento.
En el impacto, la hélice golpeó un muro cercano, lo que dejó a la avioneta completamente inmovilizada.
Al recibir el reporte, elementos de seguridad aeroportuaria, bomberos y paramédicos acudieron de inmediato al lugar, donde confirmaron que no se encontraban personas dentro de la aeronave ni se reportaron lesionados.
Tampoco se registraron daños a otras instalaciones o aviones cercanos, más allá de los desperfectos materiales sufridos por la Cessna.
Uno de los aspectos que más llamó la atención de las autoridades fue que, al momento de la llegada de los cuerpos de emergencia, no había rastro del piloto o de algún otro ocupante.
Esta situación abrió la posibilidad de que el incidente estuviera relacionado con un intento de robo, especialmente porque los hechos ocurrieron durante la madrugada y en un ambiente de total discreción.
Inicialmente se manejó la hipótesis de que la aeronave pudo haber sido tomada sin autorización por un estudiante de aviación o por una persona con conocimientos previos, quien habría perdido el control del avión por causas aún desconocidas.
Tras el accidente, el responsable presuntamente abandonó el lugar a pie, dejando únicamente la avioneta estrellada en la escena.
Debido a la naturaleza del incidente y a la posible violación de la seguridad aeroportuaria, el caso fue turnado de inmediato al Buró Federal de Investigaciones (FBI) y al Departamento de Policía de Los Ángeles (LAPD), quienes desplegaron un operativo para dar con el paradero del sospechoso.
Horas más tarde, las autoridades lograron localizar a un hombre identificado como Ceffareno Michael Logan, de 37 años de edad, quien confesó haber ingresado ilegalmente al aeropuerto con la intención de acceder a las aeronaves.
De acuerdo con su declaración, el intento fue fallido debido a que perdió el control del avión antes de poder despegar.
Desde la LA Flight Academy, escuela de aviación con operaciones en el aeropuerto, se ofreció una explicación adicional de lo ocurrido.
“El caballero irrumpió y robó uno de los aviones, puso en marcha el motor, estaba a punto de rodar hacia afuera, y el ala golpeó uno de los hangares; el avión simplemente volcó y entró en el hangar de un vecino”, señalaron representantes de la academia.
El propio detenido explicó a las autoridades que no necesitó una llave para encender la aeronave, ya que este tipo de modelos puede arrancar sin ella, lo que sugiere que contaba con conocimientos previos en aviación o experiencia en la operación de este tipo de aviones.
Las investigaciones continúan para determinar si el individuo actuó solo, si existieron fallas en los protocolos de seguridad del aeropuerto y cuáles serán los cargos formales que enfrentará por este inusual incidente en Estados Unidos.
AM