ESTADOS UNIDOS.- Con las cifras de contagios aún en etapa de crecimiento a nivel nacional, al menos el 40 por ciento de los estados de Estados Unidos anunciaron el fin de sus respectivas cuarentenas o se hallan a horas de hacerlo.
El caso más significativo es el de Dakota del Sur donde la gobernadora Kristi Noem se negó a decretar cualquier medida de aislamiento social bajo el argumento de que el estado que gobierna “no es Nueva York”. Ni siquiera el contagio masivo que obligó al cierre de la planta donde se procesa carne de cerdo, Smithfield Foods, la hizo cambiar de opinión.
El que Dakota del Sur se halle en la parte baja de la tabla, con sus 2 mil 500 contagios y 21 muertes, parece darle la razón a Noem, quien hasta el martes 14 de abril ordenó el cierre de escuelas y recomendó a las empresas que permitieran a sus empleados trabajar desde casa. Otra media docena de estados como Arkansas y Utah, instauraron igualmente, laxas medidas de distanciamiento social.
El primero en decretar el fin de la cuarentena fue el gobernador de Georgia, Brian Kemp, quien desde el 24 de abril permitió la operación de algunos negocios como salones de belleza y restaurantes, pero ordenó a las personas de la tercera edad o a las que una condición de salud previa los hace vulnerables al covid-19, que permanecieran en sus casas.
El mismo presidente Donald Trump, quien moderó sus intenciones de abrir la economía del país el 1 de mayo, criticó la decisión de Kemp de abrir spas y estudios de tatuaje. “Quiero vernos abrir con seguridad”, dijo Trump, además de amenazar con tomar medidas en caso de que el gobernador de Georgia ordenara la operación de otros negocios que violen las pautas de la fase uno de apertura.
El estado sureño se encuentra en el lugar 12 a nivel nacional con 28 mil casos positivos y mil 177 decesos. En Oklahoma igualmente desde el 24 de abril se permite la apertura de negocios de cuidado personal como salones de belleza y spa y desde el viernes primero la de cines, gimnasios e iglesias.
Todas las aperturas son paulatinas y están llenas de reglas, como obligar a restaurantes a operar al 50 y hasta 25 % de su capacidad, el someter a cuarentena a quienes lleguen de otros estados, el uso obligatorio de cubrebocas y la necesidad de guardar la distancia de 2 metros junto a la de no permitir reuniones de más de 10 personas. Se señaló en casi todos los casos que empresas de la construcción y fábricas de manufactura, sean las primeras que pueden regresar a operar. En el caso de los pequeños negocios son los restaurantes y sitios de cuidado personal como los primeros beneficiados.
Según las estadísticas que desde el inició de la emergencia sanitaria ha ofrecido la Universidad Johns Hopkins, no hay un claro indicador que muestre que la curva de contagio y muertos vayan a la baja en todo el país. En las cinco semanas que iniciaron el 29 de marzo y culminaron el 2 de mayo, los promedios se han mantenido estables, ocurriendo el punto más alto de positivos durante la primera de abril cuando se sumaron 26 mil 900 diarios.
En cuanto a los fallecidos, fue la semana del 19 al 25 de abril la más trágica con un promedio de 2 mil 359 diarios. En la semana que recién terminó los contagios seguían arriba del umbral de los 24 mil y los muertos cada 24 horas no había bajado de los mil 600, promedio similar al registrado la segunda semana de abril.
No obstante, estados como Texas, noveno lugar nacional con 31 mil contagios y 874 decesos, inicio el viernes la primera fase de reapertura donde se permitirá la operación de restaurantes, tiendas, iglesias y cines, con algunas de las “restricciones” citadas. El gobernador Greg Abbott, alentó, incluso, la operación de museos y bibliotecas desde este fin de semana.
Pese al llamado de casi todos los actores de esta crisis a no politizar la pandemia, de los 20 estados que ya iniciaron con la “apertura” sólo 4 son gobernados por demócratas que, por otro lado, sólo representan un tercio del total de los que actualmente tiene un cargo así. Empero, más de la mitad de los estados, 25 de ellos, tiene sus “aperturas" programadas entre el 8 y el 31 de mayo, incluidos Nueva York y Nueva Jersey.
Aunque Andrew Cuomo, el gobernador de Nueva York, ha dicho que cualquier fecha es tentativa y que se halla sujeta a que, de ser necesario, se extienda la medida, como ya ha venido sucediendo. Virginia, es el único estado que mando el fin del confinamiento al 10 de junio, aunque en su mandato se contradice pues permitir a partir del 8 de mayo, teatros, gimnasios e hipódromos.
mvls
ESTADOS UNIDOS.- Con las cifras de contagios aún en etapa de crecimiento a nivel nacional, al menos el 40 por ciento de los estados de Estados Unidos anunciaron el fin de sus respectivas cuarentenas o se hallan a horas de hacerlo.
El caso más significativo es el de Dakota del Sur donde la gobernadora Kristi Noem se negó a decretar cualquier medida de aislamiento social bajo el argumento de que el estado que gobierna “no es Nueva York”. Ni siquiera el contagio masivo que obligó al cierre de la planta donde se procesa carne de cerdo, Smithfield Foods, la hizo cambiar de opinión.
El que Dakota del Sur se halle en la parte baja de la tabla, con sus 2 mil 500 contagios y 21 muertes, parece darle la razón a Noem, quien hasta el martes 14 de abril ordenó el cierre de escuelas y recomendó a las empresas que permitieran a sus empleados trabajar desde casa. Otra media docena de estados como Arkansas y Utah, instauraron igualmente, laxas medidas de distanciamiento social.
El primero en decretar el fin de la cuarentena fue el gobernador de Georgia, Brian Kemp, quien desde el 24 de abril permitió la operación de algunos negocios como salones de belleza y restaurantes, pero ordenó a las personas de la tercera edad o a las que una condición de salud previa los hace vulnerables al covid-19, que permanecieran en sus casas.
El mismo presidente Donald Trump, quien moderó sus intenciones de abrir la economía del país el 1 de mayo, criticó la decisión de Kemp de abrir spas y estudios de tatuaje. “Quiero vernos abrir con seguridad”, dijo Trump, además de amenazar con tomar medidas en caso de que el gobernador de Georgia ordenara la operación de otros negocios que violen las pautas de la fase uno de apertura.
El estado sureño se encuentra en el lugar 12 a nivel nacional con 28 mil casos positivos y mil 177 decesos. En Oklahoma igualmente desde el 24 de abril se permite la apertura de negocios de cuidado personal como salones de belleza y spa y desde el viernes primero la de cines, gimnasios e iglesias.
Todas las aperturas son paulatinas y están llenas de reglas, como obligar a restaurantes a operar al 50 y hasta 25 % de su capacidad, el someter a cuarentena a quienes lleguen de otros estados, el uso obligatorio de cubrebocas y la necesidad de guardar la distancia de 2 metros junto a la de no permitir reuniones de más de 10 personas. Se señaló en casi todos los casos que empresas de la construcción y fábricas de manufactura, sean las primeras que pueden regresar a operar. En el caso de los pequeños negocios son los restaurantes y sitios de cuidado personal como los primeros beneficiados.
Según las estadísticas que desde el inició de la emergencia sanitaria ha ofrecido la Universidad Johns Hopkins, no hay un claro indicador que muestre que la curva de contagio y muertos vayan a la baja en todo el país. En las cinco semanas que iniciaron el 29 de marzo y culminaron el 2 de mayo, los promedios se han mantenido estables, ocurriendo el punto más alto de positivos durante la primera de abril cuando se sumaron 26 mil 900 diarios.
En cuanto a los fallecidos, fue la semana del 19 al 25 de abril la más trágica con un promedio de 2 mil 359 diarios. En la semana que recién terminó los contagios seguían arriba del umbral de los 24 mil y los muertos cada 24 horas no había bajado de los mil 600, promedio similar al registrado la segunda semana de abril.
No obstante, estados como Texas, noveno lugar nacional con 31 mil contagios y 874 decesos, inicio el viernes la primera fase de reapertura donde se permitirá la operación de restaurantes, tiendas, iglesias y cines, con algunas de las “restricciones” citadas. El gobernador Greg Abbott, alentó, incluso, la operación de museos y bibliotecas desde este fin de semana.
Pese al llamado de casi todos los actores de esta crisis a no politizar la pandemia, de los 20 estados que ya iniciaron con la “apertura” sólo 4 son gobernados por demócratas que, por otro lado, sólo representan un tercio del total de los que actualmente tiene un cargo así. Empero, más de la mitad de los estados, 25 de ellos, tiene sus “aperturas" programadas entre el 8 y el 31 de mayo, incluidos Nueva York y Nueva Jersey.
Aunque Andrew Cuomo, el gobernador de Nueva York, ha dicho que cualquier fecha es tentativa y que se halla sujeta a que, de ser necesario, se extienda la medida, como ya ha venido sucediendo. Virginia, es el único estado que mando el fin del confinamiento al 10 de junio, aunque en su mandato se contradice pues permitir a partir del 8 de mayo, teatros, gimnasios e hipódromos.
mvls