CIUDAD DE MÉXICO. — América Latina y el Caribe se consagró el domingo a la virgen de Guadalupe, patrona de las Américas, para pedir por la salud del mundo y el fin de la pandemia del COVID-19 que ha contagiado a más de 50 mil personas en la región y matado a más de 2 mil.
La Consagración realizada a mediodía hora de México, donde se encuentra la basílica de Guadalupe, fue acompañada por el sonido de las 12 campanadas en distintas catedrales del continente con las que se dio inicio al rezo del rosario.
Franco Coppola, nuncio apostólico en México, fue el encargado de leer un mensaje del papa en el que Francisco bendijo a todos los latinoamericanos en estos “momentos de oscuridad” y a los que llamó a estar juntos en la lucha contra la pandemia.
“No podemos salvarnos cada uno por nuestra cuenta sino solo unidos”, dijo Coppola ante un templo vacío en el que solo estaban los sacerdotes que oficiaron la ceremonia retransmitida en Internet, el lugar donde se han dado cita todos los actos de esta Semana Santa tan peculiar debido al encerramiento exigido por las autoridades para intentar contener la expansión del coronavirus.
En México, el segundo país con más católicos del continente, la Conferencia Episcopal alentaba a grabar videos con el sonido de las campanas de la iglesia que cada fiel tuviera cercana y las subiera a las redes sociales en un intento más de intentar vivir estas celebraciones en comunidad.
Durante los días de pascua en México se suprimieron las misas y procesiones y uno de los viacrucis públicos más tradicionales del país, el del barrio de Iztapalapa, cambió el recorrido entre decenas de miles de personas que se aglomeraban otros años por el oriente de la Ciudad de México por una inédita retransmisión en vivo en el atrio del templo.
Pero en algunos puntos del país, menos afectados por el COVID-19, se mantuvieron algunas ceremonias religiosas en comunidades rurales y uno de los principales mercados de pescado de la capital se vio abarrotado para celebrar los últimos días de cuaresma, sin respetar las indicaciones de aislamiento social.
México reportaba hasta el momento más de 4 mil 200 contagios y al menos 273 muertes por la enfermedad.
En tanto, el domingo se anunció en el país el fallecimiento de Jaime Ruiz Sacristán, el presidente del consejo de administración de la Bolsa Mexicana de Valores.
Ruiz Sacristán fue uno de los primeros personajes públicos confirmados con COVID-19 a mediados de marzo y cuya muerte se hace pública.
Según la prensa local, Ruiz Sacristán, de 70 años, se contagió en Vail, Colorado, destino de al menos 400 mexicanos de la elite más adinerada del país a quienes las autoridades rastreaban porque temían que pudieran ser un importante foco de la enfermedad.
Las autoridades de este estado norteño confirmaron al menos 17 casos positivos de COVID-19 entre las personas que viajaron a ese destino.
Otras personalidades afectadas por el coronavirus son tres gobernadores mexicanos, el de Querétaro, Hidalgo (ambos en el centro del país) y el de Tabasco, en el sureste.
El presidente Andrés Manuel López Obrador no se ha sometido a la prueba porque, según dijo, no ha tenido ningún síntoma y se encuentra bien.
El portavoz del gobierno federal para la pandemia, Hugo López-Gatell, criticó que en algunos lugares no se estén siguiendo las recomendaciones de aislamiento social cuando el país se prepara para entrar en la fase 3 de la epidemia que implica una multiplicación exponencial de casos y de muertes.
En Guatemala, entretanto, subió a cinco el número de muertos por coronavirus y a 152 el de contagiados. Una mujer positiva dio a luz a una pareja de gemelos, quienes estarían libres del virus, según las autoridades del país centroamericano.
En Ecuador, el número de contagiados reportados hasta el domingo era de 7 mil 466 y de 333 fallecidos a causa del COVID-19, aunque las autoridades sospechan que otras 384, a las que no se les tomaron pruebas, probablemente murieron por la misma causa. La provincia de Guayas, cuya capital es Guayaquil, sigue siendo el epicentro de la pandemia en el país andino con 5 mil 381 casos.
Ecuador es el país más golpeado de momento por la pandemia en la región, después de Brasil.
En Latinoamérica y el Caribe se reportaban más de 56 mil 700 contagiados y más de 2 mil 300 fallecidos por el coronavirus.
La pandemia ha infectado a más de 1,7 millón de personas y causado la muerte a más de 103 mil 870 en todo el mundo, según el Centro de Ciencias e Ingeniería de Sistemas de la Universidad Johns Hopkins, que basa sus datos en los informes de los gobiernos y las autoridades de salud de cada país.
En la mayoría de la gente este virus provoca síntomas leves o moderados que desaparecen en dos a tres semanas. Pero en algunas personas, sobre todo los adultos mayores y quienes padecen trastornos de salud subyacentes, puede causar enfermedades más graves e incluso la muerte.
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CIUDAD DE MÉXICO. — América Latina y el Caribe se consagró el domingo a la virgen de Guadalupe, patrona de las Américas, para pedir por la salud del mundo y el fin de la pandemia del COVID-19 que ha contagiado a más de 50 mil personas en la región y matado a más de 2 mil.
La Consagración realizada a mediodía hora de México, donde se encuentra la basílica de Guadalupe, fue acompañada por el sonido de las 12 campanadas en distintas catedrales del continente con las que se dio inicio al rezo del rosario.
Franco Coppola, nuncio apostólico en México, fue el encargado de leer un mensaje del papa en el que Francisco bendijo a todos los latinoamericanos en estos “momentos de oscuridad” y a los que llamó a estar juntos en la lucha contra la pandemia.
“No podemos salvarnos cada uno por nuestra cuenta sino solo unidos”, dijo Coppola ante un templo vacío en el que solo estaban los sacerdotes que oficiaron la ceremonia retransmitida en Internet, el lugar donde se han dado cita todos los actos de esta Semana Santa tan peculiar debido al encerramiento exigido por las autoridades para intentar contener la expansión del coronavirus.
En México, el segundo país con más católicos del continente, la Conferencia Episcopal alentaba a grabar videos con el sonido de las campanas de la iglesia que cada fiel tuviera cercana y las subiera a las redes sociales en un intento más de intentar vivir estas celebraciones en comunidad.
Durante los días de pascua en México se suprimieron las misas y procesiones y uno de los viacrucis públicos más tradicionales del país, el del barrio de Iztapalapa, cambió el recorrido entre decenas de miles de personas que se aglomeraban otros años por el oriente de la Ciudad de México por una inédita retransmisión en vivo en el atrio del templo.
Pero en algunos puntos del país, menos afectados por el COVID-19, se mantuvieron algunas ceremonias religiosas en comunidades rurales y uno de los principales mercados de pescado de la capital se vio abarrotado para celebrar los últimos días de cuaresma, sin respetar las indicaciones de aislamiento social.
México reportaba hasta el momento más de 4 mil 200 contagios y al menos 273 muertes por la enfermedad.
En tanto, el domingo se anunció en el país el fallecimiento de Jaime Ruiz Sacristán, el presidente del consejo de administración de la Bolsa Mexicana de Valores.
Ruiz Sacristán fue uno de los primeros personajes públicos confirmados con COVID-19 a mediados de marzo y cuya muerte se hace pública.
Según la prensa local, Ruiz Sacristán, de 70 años, se contagió en Vail, Colorado, destino de al menos 400 mexicanos de la elite más adinerada del país a quienes las autoridades rastreaban porque temían que pudieran ser un importante foco de la enfermedad.
Las autoridades de este estado norteño confirmaron al menos 17 casos positivos de COVID-19 entre las personas que viajaron a ese destino.
Otras personalidades afectadas por el coronavirus son tres gobernadores mexicanos, el de Querétaro, Hidalgo (ambos en el centro del país) y el de Tabasco, en el sureste.
El presidente Andrés Manuel López Obrador no se ha sometido a la prueba porque, según dijo, no ha tenido ningún síntoma y se encuentra bien.
El portavoz del gobierno federal para la pandemia, Hugo López-Gatell, criticó que en algunos lugares no se estén siguiendo las recomendaciones de aislamiento social cuando el país se prepara para entrar en la fase 3 de la epidemia que implica una multiplicación exponencial de casos y de muertes.
En Guatemala, entretanto, subió a cinco el número de muertos por coronavirus y a 152 el de contagiados. Una mujer positiva dio a luz a una pareja de gemelos, quienes estarían libres del virus, según las autoridades del país centroamericano.
En Ecuador, el número de contagiados reportados hasta el domingo era de 7 mil 466 y de 333 fallecidos a causa del COVID-19, aunque las autoridades sospechan que otras 384, a las que no se les tomaron pruebas, probablemente murieron por la misma causa. La provincia de Guayas, cuya capital es Guayaquil, sigue siendo el epicentro de la pandemia en el país andino con 5 mil 381 casos.
Ecuador es el país más golpeado de momento por la pandemia en la región, después de Brasil.
En Latinoamérica y el Caribe se reportaban más de 56 mil 700 contagiados y más de 2 mil 300 fallecidos por el coronavirus.
La pandemia ha infectado a más de 1,7 millón de personas y causado la muerte a más de 103 mil 870 en todo el mundo, según el Centro de Ciencias e Ingeniería de Sistemas de la Universidad Johns Hopkins, que basa sus datos en los informes de los gobiernos y las autoridades de salud de cada país.
En la mayoría de la gente este virus provoca síntomas leves o moderados que desaparecen en dos a tres semanas. Pero en algunas personas, sobre todo los adultos mayores y quienes padecen trastornos de salud subyacentes, puede causar enfermedades más graves e incluso la muerte.
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