BRASIL.- El presidente ultraderechista Jair Bolsonaro prometió el domingo trabajar para que "el bien venza al mal" en Brasil, al lamentar la muerte de un policía en Río de Janeiro y mientras tropas federales combaten en el noreste del país a bandas criminales.
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En un tuit, Bolsonaro envió condolencias a la familia del oficial que murió por disparos el domingo en la mañana cuando se enfrentaba a asaltantes armados en Río de Janeiro.
El mandatario lamentó que el personal de seguridad y los ciudadanos blanco de criminales fueran antes tratados como mera estadística. "El (poder) legislativo, ejecutivo y judicial juntos deben, a través de la ley, dar garantía de que el bien venza al mal".
Esta declaración se dio mientras 300 soldados estaban siendo desplegados en Fortaleza, capital del estado de Ceará (noreste), durante el fin de semana para contener una ola de violencia generada por bandas criminales.
El mandatario lamentó que el personal de seguridad y los ciudadanos blanco de criminales fueran antes tratados como mera estadística. "El (poder) legislativo, ejecutivo y judicial juntos deben, a través de la ley, dar garantía de que el bien venza al mal".
Esta declaración se dio mientras 300 soldados estaban siendo desplegados en Fortaleza, capital del estado de Ceará (noreste), durante el fin de semana para contener una ola de violencia generada por bandas criminales.
El ministro de justicia Sergio Moro ordenó el despliegue militar ante el pedido del gobernador del estado, quien pertenece al izquierdista opositor Partido de los Trabajadores (PT).
Unos 87 sospechosos han sido arrestados en Fortaleza y otros 23 pueblos del estado, reportó la estatal Agencia Brasil.
El gobernador, Camilo Santana, fue citado diciendo que la policía estatal y los soldados estaban trabajando de manera conjunta. "Seré duro con el crimen", declaró.
Una docena de ataques fueron perpetrados en Ceará en la última semana por bandas criminales en estaciones de servicio, autobuses, edificios de gobierno y tiendas.
Ante el clima de violencia, los residentes de Fortaleza y otros pueblos han decidido permanecer en sus casas.
La inteligencia brasileña cree que se trata de una reacción de las bandas criminales ante el endurecimiento de medidas de seguridad dentro de la prisiones estatales, que incluyen el bloqueo de señal a teléfonos celulares y la conclusión de una política que permitía mantener separados a los reclusos de acuerdo a los grupos criminales a los que pertenecen.
IH