La tranquilidad en torno a la esfera del poder argentino se vio interrumpida este martes tras confirmarse el fallecimiento de un oficial del Ejército que se encontraba cumpliendo funciones de seguridad en las inmediaciones de la residencia presidencial de Olivos.
El suceso, envuelto en un manto de misterio, está siendo objeto de una exhaustiva investigación judicial para determinar las circunstancias exactas de la muerte.
Emiten comunicado oficial
Según el informe oficial emitido por el Gobierno argentino, el militar fue descubierto sin vida durante las primeras horas de la madrugada por personal de servicio dentro de uno de los puestos internos situados en el vasto predio que alberga la Quinta Presidencial, donde reside actualmente el presidente Javier Milei, en las afueras de la capital.
De inmediato, se activaron los protocolos de emergencia. Personal médico de urgencia se trasladó al lugar, confirmando lamentablemente el deceso del oficial. Por disposición del juzgado federal competente, a cargo de la jueza Sandra Arroyo Salgado, se procedió a dar intervención a diversas áreas de las fuerzas federales.
La misión de estas entidades es clara: llevar a cabo todas las pericias necesarias y recabar la evidencia fundamental para lograr el esclarecimiento total de los hechos. La naturaleza del fallecimiento y si existen o no indicios de terceros involucrados son las principales incógnitas que busca despejar la pesquisa.
Investigación continúa en desarollo
En un escueto, pero significativo comunicado, el Gobierno enfatizó que la investigación se encuentra en pleno desarrollo, manteniendo todas las posibles hipótesis bajo un análisis riguroso.
Este tipo de incidentes en un área de máxima seguridad, como lo es la residencia del mandatario, genera inevitablemente gran repercusión y especulación en la opinión pública y los medios.
La noticia pone de relieve la vulnerabilidad, incluso en los entornos más protegidos, y la urgencia de determinar si se trató de un evento natural, un accidente, un acto autoinfligido, o si, por el contrario, hay elementos criminales que deban ser perseguidos.
Los detalles sobre la identidad del oficial y su antigüedad en el puesto no han sido difundidos, a la espera de los avances que surjan de las diligencias judiciales y forenses.
El país permanece atento a las novedades que pueda arrojar la investigación de la jueza Arroyo Salgado sobre este trágico y confuso episodio ocurrido en el corazón del dispositivo de seguridad del Estado argentino.
POT