El presunto autor de una masacre que cobró la vida de 22 personas en una tienda de la cadena Walmart en El Paso, Texas, se declaró inocente este jueves durante una breve audiencia inicial.
La policía informó que Patrick Crusius, de 21 años y oriundo de Dallas, había confesado al momento de su arresto ser el responsable del tiroteo ocurrido el 3 de agosto y que su objetivo era asesinar mexicanos.
El jueves a mediodía, alrededor de 80 personas y 30 miembros de la prensa pasaron por una revisión de seguridad antes de tomar sus asientos en una corte del Tribunal del condado de El Paso.
Entre el público había una delegación del Consulado de México. Un alguacil pidió a los presentes mantenerse en silencio y advirtió contra arrebatos.
Ocho mexicanos fallecieron en el ataque y la mayoría de las víctimas tenía apellidos hispanos. Una de las personas asesinadas era de nacionalidad alemana que vivía en Ciudad Juárez.
Una veintena de personas resultaron lesionadas pero sobrevivieron; funcionarios de hospitales informaron que dos personas continúan internadas.
Fiscales locales indicaron que solicitarán la pena de muerte. Las autoridades federales también están considerando cargos por asesinato punible con la pena capital y por crímenes de odio.
El Departamento de Justicia catalogó el tiroteo como un acto de terrorismo nacional.
Hubo aproximadamente 2 mil testigos en el lugar de la masacre, por lo que prácticamente todos entre los casi 700 mil habitantes de la ciudad conocen a alguien que se vio afectado directamente por el ataque.
La jueza que originalmente había sido asignada, debió recusarse del caso porque conocía a una de las personas que falleció en el tiroteo. El principal fiscal dijo que su hermana se hallaba en la tienda Walmart al momento del ataque y que el presunto agresor pasó justo al lado de ella.
Crusius se entregó voluntariamente menos de una hora después del tiroteo, luego de huir del lugar en su auto, de acuerdo con la policía. Su orden de aprehensión indica que al momento de entregarse dijo “soy quien disparó”.
Según la Policía, el joven publicó un manifiesto racista pocos minutos antes del ataque en el que expresó su deseo de asesinar a hispanos para balcanizar Estados Unidos en criterios raciales.
Crusius se encuentra detenido sin derecho a fianza en una cárcel de El Paso. Está bajo vigilancia ante posibilidades de suicidio prácticamente desde que fue arrestado y se encuentra aislado del resto de los prisioneros.