Joe Biden, presidente de Estados Unidos y Jill Biden, la primera dama, viajarán a Uvalde, Texas, el 29 de mayo, para reunirse con los familiares de las víctimas de la masacre en la primaria Robb Elementary School, en la que 19 niños y dos maestras fueron asesinadas.
La Casa Blanca dijo que los Biden “se dolerán con la comunidad que perdió 21 vidas en el horripilante” tiroteo en la Escuela Primaria Robb. La secretaria de prensa Karine Jean-Pierre dijo que el presidente se reunirá con líderes religiosos y de la comunidad, y con familiares de las víctimas.
Jean-Pierre, que es la madre de una niña de primaria, hizo un apasionado pedido en la Casa Blanca para que los congresistas se unan para dar respuesta a la violencia con armas de fuego.
“Esos eran estudiantes de primaria, deberían estar perdiendo sus primeros dientes, no sus vidas”, dijo.
A una pregunta sobre lo apropiado de que la Asociación Nacional del Rifle (NRA por sus siglas en inglés) proceda con su convención anual en Houston este fin de semana, Jean-Pierre respondió: “Lo que es inapropiado es que los líderes de la Asociación Nacional del Rifle hayan demostrado una y otra vez que ellos están contribuyendo al problema de la violencia con armas de fuego, no tratando de resolverlo”.
“Es vergonzoso que la NRA y sus aliados se hayan interpuesto en el camino de cada intento para impulsar medidas que todos sabemos salvarán vidas”, manifestó.
Jean-Pierre repitió las palabras de Biden, que el martes por la noche habló sobre la experiencia personal de perder un hijo y llamó al país a fortalecer las leyes de control de armas en respuesta al tiroteo.
“¿Cuándo en el nombre de Dios vamos a confrontar al cabildeo de las armas?”, cuestionó el mandatario. “¿Por qué necesitamos vivir con esta carnicería? ¿Por qué seguimos dejando que esto suceda?”.