El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, provocó una serie de reprimendas veladas por parte de Israel tras asegurar que el genocidio de judíos por los nazis, durante la Segunda Guerra Mundial, podría ser perdonado.
El ultraderechista Bolsonaro realizó una visita a Israel el mes pasado, durante la cual provocó sorpresa al asegurar, tras visitar el memorial del Holocausto Yad Vashem, que los nazis fueron "izquierdistas".
En declaraciones a un grupo de evangélicos brasileños el jueves, Bolsonaro dijo: "Podemos perdonar, pero no podemos olvidar. Esa es mi frase. Los que olvidan su pasado están condenados a no tener futuro".
No hubo una respuesta inmediata por parte del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, que ha cultivado estrechos lazos personales con Bolsonaro.
Sin embargo, el presidente Reuven Rivlin, cuyo papel en Israel es sobre todo simbólico, escribió en Twitter: "Sean individuos u organizaciones, jefes de partido o de estado, nadie ordenará al pueblo judío que olvide, algo que tampoco podrá obtenerse a través de ningún interés".
El Yad Vashem dijo en un comunicado por separado: "No es tarea de nadie decidir quién puede ser perdonado y si debería haber perdón por los crímenes del Holocausto".