Un día de descanso en Praia do Campeche, en Florianópolis, Brasil, terminó en indignación y detención cuando un turista fue sorprendido grabando sin consentimiento a mujeres en traje de baño, conducta que rápidamente se convirtió en un acto de repudio colectivo y acción policial.
El incidente, registrado por testigos en la popular playa del estado de Santa Catarina, dejó al descubierto no solo la invasión a la privacidad, sino también una actitud que los bañistas consideraron completamente inaceptable en un espacio público.
De acuerdo con los testigos, el hombre, identificado como turista estadounidense, utilizaba su teléfono móvil con el zoom activado, enfocando partes íntimas de una joven que tomaba el sol sin saber que estaba siendo grabada.
La reacción de los bañistas fue inmediata: varios de ellos lo confrontaron y lo inmovilizaron, impidiendo que eliminara las imágenes del dispositivo.
Su intervención fue clave para asegurar las pruebas y mantenerlo bajo vigilancia hasta la llegada de la Policía Militar de Santa Catarina (PMSC).
Al revisar el teléfono confiscado, las autoridades encontraron no solo los videos inapropiados, sino también mensajes alarmantes en aplicaciones de mensajería, que reforzaron la gravedad de la conducta.
Mensaje perturbador en chat de WhatsApp
Entre ellos, destacaba un mensaje supuestamente enviado por un familiar que decía en inglés: “Buen hallazgo, hijo, por esto te van a dar una buena paliza”, lo cual, más allá de causar indignación, evidenció la falta de respeto hacia las personas filmadas.
Tras el hallazgo y la confirmación de la conducta indebida, el turista fue detenido por la PMSC y ahora enfrenta cargos bajo la figura de “registro no autorizado de intimidad sexual”, un delito contemplado en el Código Penal brasileño que busca proteger la privacidad y la dignidad de las personas frente a actos de acoso o explotación digital y física.
La legislación en Brasil ha sido fortalecida en los últimos años para combatir con mayor firmeza casos de violencia de género, acoso digital y grabaciones sin permiso, lo que coloca al detenido ante posibles sanciones severas si es hallado culpable.
El caso ha generado una fuerte respuesta en redes sociales y medios internacionales, donde se ha discutido sobre la importancia de respetar los espacios públicos y la privacidad de las personas, especialmente en entornos turísticos donde la convivencia y la seguridad son esenciales.
- Internacional
Usuarios y ciudadanos han destacado que la intervención de los bañistas y la posterior acción policial enviaron un claro mensaje sobre la intolerancia a este tipo de comportamientos.
Las autoridades brasileñas continúan con la investigación, mientras que activistas y organizaciones defensoras de los derechos de las mujeres han celebrado la detención como un paso importante para proteger a quienes visitan lugares públicos sin temor a ser objeto de grabaciones indebidas.
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