LA PAZ.- Bolivia reporta este martes un estado de calma luego que las Fuerzas Armadas y la Policía anunciaron el inicio de operaciones conjuntas en todo el país para contener los actos de vandalismo, tanto de grupos que defienden al mandatario dimitente Evo Morales, como los que celebran su salida de la Presidencia.
Los habitantes de La Paz, la capital del país, intentan retomar su normalidad, luego que esta ciudad fue escenario de varias protestas que derivaron en enfrentamientos y actos de violencia que dejaron decenas de heridos y vandalismo.
Reportes de periódicos locales reseñan que la noche del lunes los capitalinos se organizaron para evitar actos de vandalismo y resguardar sus barrios, que también fueron patrullados por la policía y militares.
En la zona de Wilakota, en El Alto, decenas de grupos afines al mandatario dimitente “sembraron terror durante el lunes”, y conforme avanzaban hacia La Paz engrosaban sus filas provocando destrozos a su paso.
Pero, luego que el comandante de las Fuerzas Armadas, Williams Kaliman, anunció operaciones conjuntas con la policía, todas estas personas comenzaron a retroceder, reportó el diario Página Siete.
En la zona de El Alto, los militares realizaron varios patrullajes por calles y avenidas, y con ayuda de los vecinos vigilaron el área para evitar actos vandálicos.
“A las 22:00 horas la gente liberó el paso a los carros militares y los aplaudió”, afirmaron vecinos de El Alto, al diario.
Los vecinos se organizaron para instalar barricadas, encender fogatas y controlaban el paso de personas, además exigían cédulas de identidad para garantizar que se trataba de vecinos del sector.
La intervención de las fuerzas del orden se dio luego que cientos de personas que se opone a la renuncia de Morales a la Presidencia, intentaron llegar a La Paz, armados con palos y otros objetos al grito de: “Ahora sí, guerra civil”, mientras a su paso causaban destrozos.
Grupos violentos quemaron y destrozaron el lunes oficinas de Tránsito, Radio Patrullas y de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) en El Alto, reportó el periódico La Razón.
En Huayllani, Achumani, al sur de La Paz, donde la noche del lunes fueron quemados varios autobuses de Pumaktari, los vecinos reportaron calma este martes.
En Cochabamba, las instalaciones de la Estación Policial Integral (EPI) del Sur también fue quemada y vehículos fueron incendiados.
En medio de los altercados, residentes de Cochabamba detuvieron la noche del lunes a tres personas acusadas de promover la violencia y de hacer destrozos. Los vecinos les gritaban: "¡cuánto te pagaron!, ¡cuánto te pagaron!", mientras que los detenidos negaban haber participado en actos vandálicos.
Mientras que en Potosí, vecinos reportan la desaparición de un joven, que habría sido tomado como rehén por personas que atacaron una de las caravanas de mineros que viajaban el fin de semana hacia La Paz y sus captores se comunicaron con su familia para pedir un canje por los detenidos
La violencia en Bolivia se desató el fin de semana entre grupos de la oposición y afines al gobierno. La presión social creció y a ella se sumó el motín a nivel nacional que realizó la policía, así como el llamado de las Fuerzas Armadas para que el presidente Evo Morales dimitiera.
Morales, tras 14 años en el poder, presentó su renuncia el domingo y salió rumbo a México donde le fue otorgado asilo.
dezr