BUENOS AIRES (Reuters) - Los países fundadores del bloque comercial Mercosur y Estados Unidos condenaron el miércoles la irrupción de seguidores del Gobierno de Venezuela en la sede de la Asamblea Nacional en la capital del país, que dejó a varios diputados opositores heridos.
El presidente español, Mariano Rajoy, y los gobiernos de Colombia, México y Perú también reprobaron los hechos acontecidos en Caracas, donde decenas de personas forzaron las puertas del Parlamento, agrediendo a legisladores y periodistas.
"Exhortamos al Gobierno de Venezuela a poner fin inmediatamente a todo discurso y acciones que incentiven una mayor polarización, con el consecuente crecimiento de la violencia", señalaron Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay, los países fundadores del Mercosur, a través de un comunicado.
El Mercosur -bloque al que Venezuela ganó acceso- aplicó en abril una cláusula democrática a Caracas tras un intento de la Justicia local de asumir el rol del Congreso.
Por su parte, el Gobierno estadounidense condenó "el ataque a miembros de la Asamblea Nacional venezolana por parte de seguidores armados del Gobierno del presidente Nicolás Maduro", al que pidió que provea de protección inmediata a la institución.
Desde la vecina Colombia, el presidente Juan Manuel Santos reiteró su llamado a una salida negociada de la crisis, mientras que Rajoy expresó a través de Twitter su "rotunda condena al violento asalto del Parlamento de Venezuela".
Los Gobiernos de México y Perú también se unieron a la condena y al llamado al diálogo y a la paz. En tanto, el embajador de Gran Bretaña en Caracas, John Saville, señaló que "para de verdad lograr la paz, se debe actuar democráticamente y sin violencia".