KABUL. — El Talibán accedió a una tregua en todo Afganistán el domingo, un acontecimiento que podría presagiar un acuerdo de paz con Estados Unidos.
Tal acuerdo podría permitirle a Washington traer a casa a sus tropas y poner fin a su intervención militar de 18 años allí, la más extensa en su historia. Estados Unidos exige que primero el Talibán se comprometa a evitar que Afganistán se convierta en una base para grupos terroristas. Actualmente hay unos 12 mil efectivos norteamericanos apostados en el país asiático.
El líder del Talibán debe avalar el acuerdo, pero ello se da por seguro. No se divulgó la duración de la tregua, pero fuentes oficiales mencionaron la posibilidad de que se extienda por 10 días.
Miembros de la delegación negociadora del Talibán se reunieron por una semana con el consejo gobernante del país antes de acceder a la tregua.
La delegación regresó el domingo a Qatar donde tienen una oficina política.
Las fuentes del Talibán que revelaron el acuerdo hablaron a condición de anonimato por no tener autorización para hablarle a la prensa.
Uno de los elementos clave del pacto, que representantes estadounidenses y talibanes llevan más de un año tratando de forjar, es que se realicen negociaciones directas entre los afganos en conflicto.
Tales negociaciones intra-afganas probablemente comenzarían unas dos semanas después de la firma de un acuerdo de paz entre el Talibán y Estados Unidos.
En ellas se decidirá el marco legal de un Afganistán de posguerra y el protagonismo político que tendrá el Talibán. Se decidirán también temas espinosos como los derechos de las mujeres, la libertad de expresión y la suerte de decenas de miles de combatientes del Talibán y de las numerosas milicias que han surgido desde que el Talibán fue derrocado, cuyos caudillos han amasado enormes sumas de dinero.
La tregua temporal había sido propuesta por el diplomático estadounidense a cargo del asunto, Zalmay Khalilzad, en la más reciente ronda de negociaciones.
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