Una ex empleada doméstica de Indonesia, fue indemnizada con más de 110 mil dólares (más de dos millones de pesos) después de sufrir maltratos de sus antiguos jefes, los cuales le dejaron secuelas físicas y psicológicas irreversibles.
La víctima, Kartika Puspitasari de 40 años, llegó a Hong Kong en 2010 y desde entonces, fue humillada y torturada durante dos años por sus jefes, quienes en varias ocasiones la quemaron con la plancha y la azotaban con una cadena de bicicleta. Los culpables fueron arrestados en 2013.
Sin embargo, los maltratos que sufrió salieron a la luz hasta que solicitó protección consular, regresando a Indonesia en 2014, pero sin haber recibido salario alguno.
No obstante, este 10 de febrero, un tribunal de Hong Kong dijo que la mujer había sido trata de forma inhumana y ordenó a sus ex jefes a indemnizarla con 869 mil 697 dólares hongkoneses, en concepto de daños e intereses, es decir 110 mil 600 dólares (dos millones 54 mil pesos).
"No tengo palabras para calificar su amabilidad", reaccionó Puspitasari desde su casa, en Padang, en la isla de Sumatra, dando las gracias a sus abogados y amigos.
El caso ilustra la suerte que corren cerca de 340 mil empleados domésticos extranjeros en Hong Kong, tanto mujeres de indonesia como de filipinas en su mayoría.
Grupos de defensa de derechos humanos llevan tiempo advirtiendo que el sistema hongkonés hace que los empleados domésticos sean vulnerables a la explotación, incluso están obligados a vivir en casa de sus jefes, a veces en un entorno hostil, del que puede ser difícil salir.
El departamento de Hong Kong encargado de Inmigración aseguró que da una gran importancia a la protección de los derechos de los empleados domésticos extranjeros en Hong Kong y afirmó que asistiría, en materia de visados, a quienes sean maltratados o sufran explotación.
El hombre y la mujer que habían empleado a Puspitasari, que pasaron respectivamente tres años y medio y cinco años y medio de prisión, no recurrieron las conclusiones del proceso civil.
MRG