Londres. En el aeropuerto de Heathrow de Londres, en cinco jaulas enviadas desde malasia fueron encontradas una carga ilegal de 50 cocodrilos.
Los jóvenes cocodrilos marinos, de un año de edad, eran enviados a una granja situada en el condado inglés de Cambridgeshire en donde serían criados por su carne.
Los animales no se habían transportado de conformidad con la reglamentación, lo que invalidaba su permiso y esto hacía que su importación fuera ilegal.
En cada jaula había 10 reptiles apretujados, aunque cada receptáculo sólo debía contener a cuatro de ellos, según la policía.
El jefe de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Extinción (CITES), dijo: “Los cocodrilos comenzaron a pelear entre ellos durante el trayecto debido a lo limitado del espacio, se prestó poca atención a su bienestar”.