BEIRUT, Líbano (AP) — Milicianos del grupo extremista Estado Islámico destruyeron un emblemático monumento de la antigua Roma y partes del teatro en la histórica ciudad siria de Palmira, informaron el viernes el gobierno y grupos de oposición que monitorean el conflicto.
Los combatientes destruyeron la fachada del teatro, construido en el siglo II, así como el tetrápilo —un monumento romano con forma cúbica que se encontraba en el centro de una calle flanqueada por columnas que lleva al teatrov—, afirmó Maamoun Abdulkarim, responsable del departamento sirio de antigüedades.
A finales de diciembre empezaron a conocerse noticias sobre la destrucción en la localidad, tomada por la milicia radical, dijo Abdulkarim a The Associated Press, pero las imágenes por satélite de los daños no estuvieron disponibles hasta el jueves por la noche, cuando se confirmaron los daños.
Los extremistas arrebataron en diciembre la antigua ciudad a tropas del gobierno, nueve meses después de una ofensiva con apoyo ruso expulsara a la milicia radical.
Durante su primera ocupación de la localidad, de mayo de 2015 a mayo de 2016, el grupo extremista destruyó templos antiguos como el templo de Bel —del año 32 después de Cristo— y el de Baalshamin, una estructura de bloques de piedra con varios pisos de altura que tenía seis grandes columnas en la fachada.
Palmira, reconocida como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, tiene columnatas romanas de 2.000 años de antigüedad y objetos de valor incalculable. Los sirios la conocen afectuosamente como la "Novia del desierto".
Los extremistas han destruido lugares antiguos en su autodenominado califato islámico en Siria e Irak, tachando estos restos de monumentos a la idolatría.