El derecho al aborto dejó de ser protegido a través del dictamen de la Suprema Corte de Justicia, llevado a cabo en Washington, por lo que las legislaturas estatales serán quienes determinen al respecto, generando así, las probabilidades de que al menos una veintena de ellas lo prohíban.
Cabe señalar que en mayo fue cuando se filtró el borrador de esta resolución, la Casa Blanca aceptó que después de que se confirmara el veredicto, como ocurrió durante la mañana del 24 de junio, 26 estados limitarán o restringirán el acceso al aborto.
California, Washington, Nuevo México, Nueva York y Nueva Jersey son algunos de los estados que no cambiarán nada debido a la habituada política de apoyo a las mujeres para interrumpir el embarazo, así como tienen el objetivo de defender el aborto a nivel federal.
No obstante, la anulación de la sentencia del caso Roe contra Wade dará inicio a que estados de gran tradición conservadora como Alabama, Oklahoma, Texas, Misisipi y Florida, prohíban absolutamente la interrupción del embarazo en sus territorios.
En cuanto a los 22 estados, especialmente al sur y al centro norte, ya cuentan con una vigencia de prohibiciones totales o casi totales. Además de Texas, todas se encontraban bloqueadas en los tribunales debido al blindaje que el fallo federal Roe contra Wade brindaba al derecho al aborto.
Incluso 13 estados ya tienen preparadas las denominadas “leyes de activación” que se estima que entren en vigor para prohibir el aborto básicamente de manera inmediata tras la medida tomada por la Corte.
En un artículo que fue publicado en enero en The New York Times, se citaba al Centro de Derechos Reproductivos que indica que desde 1994 únicamente tres países en el mundo han endurecido las leyes implicadas al aborto, tales como Polonia, El Salvador y Nicaragua, sin embargo, 59 las flexibilizaron.
AA