WASHINGTON. — El gobierno del presidente Donald Trump planea ampliar la toma de muestras de ADN de migrantes que cruzan las fronteras de Estados Unidos, e incluir esta información en una gran base de datos criminales operada por el FBI.
Este plan es diferente y mucho más amplio que las pruebas rápidas de ADN que se les hacen a las familias en la frontera con México para ayudar a detectar a adultos que se hacen pasar por padres de niños migrantes. Aún no se sabe mucho más sobre la nueva toma de muestras, incluyendo el propósito y si también sería aplicable a niños que cruzan la frontera solos o a los solicitantes de asilo.
Dos altos funcionarios del Departamento de Seguridad Nacional, que hablaron el miércoles con los reporteros a condición de guardar el anonimato para poder declarar sobre el plan, dijeron que el Departamento de Justicia estaba elaborando nuevas regulaciones y que los detalles del plan están siendo analizados en un grupo de trabajo, pero todavía no se sabe cuándo entraría en vigor.
Justo ahora ha habido un enorme incremento en el número de migrantes que cruzan la frontera, en su mayoría familias centroamericanas.
Las autoridades han dicho que la cifra disminuyó después de redadas, cambios en las regulaciones para otorgar asilo y acuerdos con países centroamericanos, pero funcionarios y agentes fronterizos han dicho estar preocupados por la posibilidad de que haya delincuentes que crucen la frontera ahora que las autoridades tienen recursos limitados.
La práctica permitiría que el gobierno recopilara valiosos datos biométricos de migrantes, lo que desataría fuertes preocupaciones por el respeto a la privacidad e interrogantes sobre si esa información debería ser recaudada incluso cuando una persona no es sospechosa de haber cometido un delito, salvo el de cruzar la frontera ilegalmente.
“No es sorprendente, dada la obsesión de este gobierno en criminalizar a la gente en la frontera, pero esto va más lejos”, dijo la abogada Vera Eidelman, de la Unión Americana de Libertades Civiles. El ADN también contiene información de identificación sobre sus familiares.
Eidelman dijo que esto modifica el propósito de la recolección de ADN, de ser una investigación penal a monitoreo de la población.
Un alto funcionario de la Patrulla Fronteriza advirtió recientemente que la ampliación de la recopilación de ADN en la frontera podría afectar negativamente el procesamiento ordenado de los migrantes. Durante una declaración jurada en un caso sobre familias separadas en la frontera, un juez le preguntó a Brian Hastings, jefe de la dirección de la Patrulla Fronteriza para la aplicación de la ley, si el ADN sería una buena herramienta para identificar familias.
“Aun cuando tales políticas y procesos estén establecidos, actualmente los agentes de la Patrulla Fronteriza no están entrenados en asuntos de salud y medidas de precaución relacionadas con la toma de ADN, ni con el manejo apropiado de las muestras de ADN para ser procesadas”, respondió.
dat