El jefe del Estado Mayor de Estados Unidos, Mark Milley, dijo que los ataques de Rusia a la infraestructura civil de Ucrania son parte de una campaña de “terror” y “crímenes de guerra”, luego de su fracaso en todos los frentes de batalla.
Milley también indicó a través de una conferencia de prensa que existen pocas probabilidades de que Ucrania pueda sacar militarmente a Rusia de todo el territorio que actualmente ocupa.
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“Impone una campaña de terror, una campaña de máximo sufrimiento sobre la población civil ucraniana, para derrotar la moral”, explicó Milley refiriéndose a Rusia.
Muchos de los recientes ataques rusos en Ucrania, incluyendo el bombardeo con decenas de misiles el 15 de noviembre, tuvieron como finalidad la infraestructura energética del país.
El general subrayó que atacar la red eléctrica civil, provocando afectaciones colaterales y sufrimiento innecesario a la población, es un crimen de guerra.
“Atacar deliberadamente la red eléctrica civil, causando daños colaterales excesivos y sufrimiento innecesario a la población, es un crimen de guerra”, refirió el jefe del Estado Mayor de Estados Unidos.
Estos ataques contra la infraestructura civil se generaron luego de una serie de fracasos de las tropas rusas en el frente de batalla. Mientras que Milley mencionó que los ucranianos consiguieron éxitos, cuando los rusos fallaron, perdiendo estratégica y operativamente.
“Los cranianos han logrado éxito tras éxito. Y los rusos han fallado cada vez. Perdieron estratégicamente, perdieron operativamente, y repito, perdieron tácticamente”, señaló el general.
Sin embargo, el general indicó que las probabilidades de que Ucrania consiga militarmente una pronta expulsión de Rusia en todo su territorio son bajas.
Por último, Milley comentó que la posibilidad de una victoria militar ucraniana, sacando a los rusos de todo el territorio de Ucrania, sin mencionar Crimea, no es alta. No obstante, recaló que tal vez exista una solución política para la retirada de Moscú.
AA