En Nueva York encontraron a una niña que fue reportada como desaparecida en julio de 2019, la menor fue hallada viva debajo de una escalera por unos agentes que registraban una casa en Hudson Valley el 14 de febrero.
Según las autoridades, la niña se encontró con buen estado de salud en una casa ubicada en Saugerties a unos 210 kilómetros al este de Cayuga Heights, lugar donde fue reportada como desaparecida hace dos años, cuando tenía cuatro años, según la policía de la entidad.
La policía dijo que inicialmente sospecharon que había sido secuestrada por sus padres sin custodia. Sin embargo, los investigadores de la Policía del Estado de Nueva York ingresaron y registraron la casa el 14 de febrero alrededor de las 8 de la noche.
Después de poco más de una hora de búsqueda, la policía encontró a la niña dentro de una pequeña habitación improvisada debajo de una escalera cerrada. El dueño de la casa, que no fue identificado de inmediato, negó haber visto a la menor desde que desapareció en 2019, dijo la policía.
Los oficiales que ejecutaron una orden de registro encontraron a la niña escondida en un recinto improvisado, frío y húmedo debajo de la escalera del sótano. Los investigadores creían que la niña había sido secuestrada por sus padres sin custodia, Kimberly Cooper y Kirk Shultis Jr.
El detective Erik Thiele había notado que los escalones de madera “eran extraños, algo estaba fuera de lugar”. Usó una linterna para hacer brillar una luz a través de una grieta entre los escalones y vio lo que pensó que era una manta.
“Al inspeccionar la escalera, la estructura parecía sólida. Sin embargo, los detectives usaron una herramienta (barra de garra) para quitar varios de los escalones de madera, y fue entonces cuando los detectives vieron un par de pies diminutos”, según el comunicado.
Pudieron ver por primera vez los pies de la niña después de quitar unos escalones de madera, según la policía. Los paramédicos encontraron a la niña en buen estado de salud. Fue entregada a su tutor legal y reunida con su hermana mayor.
Los padres sin custodia y una tercera persona fueron procesados por cargos de interferencia en la custodia y poner en peligro el bienestar de una menor. No se pudo determinar de inmediato si alguno de ellos tenía abogados que los representaran.