La mexicana Rosa Jiménez había sido condena a pasar 99 años en prisión por la muerte de un bebé que estaba bajo su cuidado. Sin embargo, fue exonerada el 7 de agosto después de que la Fiscalía de Texas desestimara los cargos en su contra.
Rosa Jiménez fue condenada por la muerte de Bryan Gutiérrez, de 21 meses, que estaba bajo su cuidado en Austin (Texas) en 2003. El niño se atragantó con toallas de papel, sufrió una lesión cerebral grave debido a la falta de oxígeno y falleció tres meses después.
En ese entonces, Rosa tenía 20 años y estaba embarazada, además cuidaba de su hija de un año. Según la mujer, ella trató de que el niño expulsara el papel, pero la policía no le creyó.
En el juicio en 2005, la Fiscalía dijo que no había manera de que el bebé hubiera podido atragantarse solo con las toallas sino que la mexicana le introdujo las toallas de papel en la boca.
El Proyecto Inocencia, que representa a Jiménez, logró reabrir el caso tras años de solicitudes para que la Fiscalía de Texas revisara el caso.
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En una audiencia en 2021, varios expertos pediátricos en las vías respiratorias concluyeron que la muerte del bebé había sido un accidente y que los testigos del juicio de 2005 llegaron a una conclusión "incorrecta".
Ante esto, Rosa fue liberada ese año después de que una jueza determinara que era inocente. Sin embargo, fue hasta 2023 que la Fiscalía ha cerrado el caso definitivamente, haciendo que Rosa Jiménez quede totalmente absuelta de la muerte de este bebé.
Lamentablemente no todo es positivo, ya que según el Proyecto Inocencia “Rosa desarrolló una enfermedad renal mientras estaba encarcelada y ahora está luchando por su vida y necesita un trasplante de riñón que le salve la vida”.
MRG