El juez instructor del juicio civil a Donald Trump, que es acusado de fraude financiero junto con dos de sus hijos, impuso el miércoles 25 de octubre una nueva multa, en esta ocasión de 10 mil dólares al magnate.
Esta vez, la sanción que se le otorgó al ex presidente, fue debido a los comentarios ofensivos contra una secretaria judicial del tribunal.
Trump, que tuvo que explicarse ante el juez Arthur Engoron, aseguró que sus declaraciones estaban dirigidas a su antiguo abogado y ahora enemigo jurado, Michael Cohen, uno de los testigos clave en el juicio civil por inflar el valor de los activos inmobiliarios de la Trump Organization.
"El testigo no fue creíble", zanjó el magistrado, antes de anunciarle la nueva multa de 10 mil dólares, que se suma a la que le impuso el viernes 20 de octubre, de miles de dólares por incumplir una orden de silencio.
"Este juez es un juez muy partidista con una persona que es muy partidista sentada a su lado, quizás incluso mucho más partidista que él", había declarado Trump a la prensa que le aguardaba en el pasillo del lado de fuera de la sala del juicio en un tribunal de Manhattan.
Informado de este nuevo exabrupto, el juez recordó que había prohibido por primera vez cualquier comentario contra los miembros de su equipo el segundo día de la audiencia, el 3 de octubre.
Los abogados de Donald Trump insistieron en que se trataba de un malentendido: el expresidente se refería a Michael Cohen, sentado a la izquierda del juez, y no a la secretaria judicial, sentada a la derecha, dijeron.
Pero el juez quiso escuchar la versión del expresidente y le pidió que se sentara en la silla de los testigos por primera vez desde que comenzó el juicio hace tres semanas.
Con el rostro iracundo, Donald Trump respondió "usted y Cohen" cuando el juez le preguntó a quién se refería, sin llegar a convencerlo. Poco después, Donald Trump se levantó y abandonó la sala.
Días antes de que se le impusiera esta nueva sansión a Donald Trump, había recibido una multa más, aunque en esa ocasión fue de 5 mil dólares debido a que rompió una orden de silencio que le fue impuesta.
En aquella ocasión, el juez que estaba a cargo de su caso, le amenazó con meterlo a la cárcel si se repetían las violaciones a las imposiciones en su contra.
JB