Un trabajador de 39 años murió inmediatamente después de que cayó a un crisol que contenía hierro fundido, un hecho que se presentó durante la mañana del 2 de junio en la planta de Caterpillar, en Mapleton, Estados Unidos.
De acuerdo a informes, alrededor de las 09:00 horas, Steven Dierkes se encontraba trabajando en el área de fusión principal cuando se cayó al interior del líquido, el cual estaba a una temperatura de más de dos mil 500 grados centrígrados, hasta el momento no se sabe cuáles fueron las circunstancias de su caída.
Empleados de la planta confirmaron que únicamente la mitad del cuerpo de Dierkes había quedado sumergido en la sustancia, mientras que la otra parte se encontraba en la plataforma. Alrededor de las 10:00 horas, personal de la oficina del Alguacil de Peoria, arribó al lugar de los hechos, el cual se encuentra en 8826 de la Ruta 24, en Mapleton.
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Jamie Harwood, forense del condado, confirmó que el operario había fallecido a causa de “aniquilación térmica”, y que sus funcionarios habían tardado varias horas en clasificar los fragmentos de metal y encontrar sus restos.
Una vez que los restos fueron rescatados, fueron cremados y enviados a la familia de Dierkes, quien era padre de tres hijas y había comenzado a trabajar en Caterpillar días antes. En su obituario, fue descrito como un “oso de peluche trabajador y un hombre con manos callosas y un corazón tierno”.
Por su parte, la gerencia de la compañía emitió un comunicado en el que confirmaban que estaban profundamente entristecidos debido a la muerte de uno de sus empleados.
Cabe señalar que este no es el primer caso en donde muere un empleado en Caterpillar, ya que Scott Adams, de 50 años, fue víctima fatal durante diciembre de 2021, después de que cayó 20 metros por un agujero en el piso, que fue supuestamente mal tapado.
AA