Roma, 11 Abr (Notimex).- El “reino” del presidente sirio Bashar al-Assad está llegando a su fin, y Rusia debe elegir con quién estar, advirtió hoy el secretario de Estado estadunidense, Rex Tillerson.
“Rusia debe elegir con quién estar, sí con Estados Unidos y con los países que tienen la misma posición, o con Al-Assad, Irán y el Hezbolláh”, señaló Tillerson al término de una cumbre ministerial del Grupo de los 7 (G-7) países más desarrollados en la ciudad italiana de Lucca.
El ministro francés de Exteriores, Jean Marc Ayrault, dijo por su parte en rueda de prensa que los participantes en la cumbre concluyeron que “no existe una solución para Siria con Al Assad en el poder”, en particular tras el ataque con armas químicas por parte del régimen sirio a la población civil en Idlib.
Según Ayrault, el G7 (integrado por Estados Unidos, Reino Unido, Alemania, Japón, Francia, Canadá e Italia) pedirá a Rusia poner fin “a la hipocresía” sobre Siria y “trabajar con los otros países para finalizar la guerra civil”.
El canciller francés indicó que “debemos tender la mano a los rusos y decir que debemos poner fin a la tragedia siria, que ya ha provocado muchos muertos”.
La víspera, el ministro británico de Exteriores, Boris Johnson, propuso aplicar nuevas sanciones contra militares sirios y rusos, pero su iniciativa no fue aceptada. Reconoció que la negociación “será compleja”, y recordó que Tillerson viajaba este mismo martes a Moscú para reunirse con el ministro ruso de Exteriores, Sergei Lavrov, y posiblemente con el presidente Vladimir Putin.
El responsable de la diplomacia alemana, Sigmar Gabriel, indicó por su parte que “Tillerson dijo explícitamente que están buscando una vía no violenta, no militar” y aseguró el apoyo de los otros países del G7 a esa postura.
Los Ministros de Exteriores del G7 realizaron una cumbre de dos días en Lucca, en el centro-norte de Italia, aunque por la mañana de este martes mantuvieron una reunión dedicada a Siria que fue ampliada a la participación de los cancilleres de Turquía, Emiratos Arabes, Arabia Saudita, Jordania y Qatar. En las sesiones participó también la responsable de Exteriores de la Unión Europea, Federica Mogherini.
En la declaración final conjunta, el G7 también llamó a retomar las negociaciones de paz en Medio Oriente, consideradas una “prioridad fundamental” y un “factor esencial” para la estabilidad y la seguridad en la región”.
Sin citar de manera explícita la solución de dos Estados (Israel y Palestina), la declaración final hizo referencia a las resoluciones del Consejo de Seguridad de las naciones Unidas 242, 338 y 1515, para que “sean tomadas en consideración” por las partes.