La Junta de Educación de Florida aprobó la prohibición de impartir enseñanza sobre orientación sexual e identidad de género en todos los grados escolares, extendiendo así, la iniciativa conocida como “ley no digas gay”, por pedido del gobernador Ron DeSantis, quien previsiblemente repara su campaña presidencial.
Esta propuesta entrará en vigor después de un periodo de notificación que dura alrededor de un mes, de acuerdo a un vocero del departamento de educación.
El cambio prohibirá dar lecciones acerca de la orientación sexual e identidad de género en los grados 4 a 12, a menos que lo requieran las pautas vigentes o como parte de una clase sobre salud reproductiva que sería optativa para los estudiantes. Hoy, esas lecciones están prohibidas desde el kínder hasta el tercer grado.
La propuesta fue presentada en marzo por el gobierno DeSantis como parte de la plataforma agresivamente derechista del político republicano, quien dedica buena parte de su campaña a estas cuestiones de cara al anuncio inminente de su candidatura a la Casa Blanca.
DeSantis no ha hecho declaraciones acerca de la propuesta. Derivó las preguntas al comisionado de Educación estatal, Manny Diaz Jr., quien mencionó que se trataba de disipar la confusión en torno de la ley vigente e insistir en que la docencia no debe apartarse de las normas curriculares.
“Nuestra docencia debe basarse en los estándares académicos estatales”, comentó Paul Burns, director de la división de escuelas públicas.
La prohibición a causado la enérgica reacción de quienes sostienen que margina a las personas LGBTQ+ y es tan vaga que provoca la autocensura en la docencia. El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, la ha calificado como “odiosa”.
Esta ley ha hecho que ocurriera un enfrentamiento con la empresa Disney, uno de los empleadores y donantes políticos más grandes del estado.
El coloso del espectáculo se opuso públicamente a la ley en 2022, y DeSantis, en revancha, solicitó a la legislatura que le diera el control sobre un distrito autónomo supervisado por Disney en sus parques temáticos.
Sin embargo, antes de que los funcionarios designados por DeSantis pudieran tomar el control del distrito, la junta de directores de Disney aprobó disposiciones que despojan a los nuevos integrantes de la mayoría de sus poderes, lo que limita las represalias del gobernador.
AA