Una mujer de 53 años, fue puesta a salvo después de permanecer secuestrada desde 2011 en Francia. De acuerdo con autoridades, la víctima fue torturada y presentaba diversas lesiones en el cuerpo; el presunto responsable es su esposo.
La mujer se encontraba en una habitación con rejas en la localidad de Forbach, al noroeste de Francia y cerca de la frontera con Alemania. Además, la policía ha mencionado que tenía la cabeza rapada, estaba desnutrida y presentaba fracturas.
El principal sospechoso, ya detenido por la policía, es el esposo de la víctima, de 55 años. Tanto él como su esposa, ahora hospitalizada, son de nacionalidad alemana.
Según la radio RMC, que fue el primer medio en informar del caso, la mujer tenía fracturas "en las dos piernas y en los dedos". Los primeros indicios apuntan a que la mujer fue probablemente torturada, según la fuente policial. Incluso en el piso de la pareja, se encontró una cama de tortura.
"Es demasiado pronto para decir nada. Se están realizando muchas comprobaciones y prefiero ser prudente", declaró a AFP una fuente policial de Metz (noreste).
Según otra fuente policial, la mujer logró hacerse con un teléfono y llamar a la policía alemana, y esta avisó a la francesa. Posteriormente la autoridad intervino el lunes por la mañana para poner a salvo a la mujer de 53 años.
Por otra parte, el diario Le Républicain Lorrain, reafirmó que la mujer estaba en una vivienda con su marido, quien la retenía “en condiciones miserables”.
La policía ya investiga el caso por secuestro, violación agravada, actos de tortura y barbarie. Hasta el momento se desconoce cuántos años podría estar en prisión el hombre, así como el estado de salud de la mujer, que está actualmente hospitalizada debido al mal estado de su cuerpo por las torturas que padeció.
MRG