Un británico de 66 años, será juzgado en diciembre por un tribunal francés, tras ser acusado de haber agredido sexualmente a una azafata durante un viaje en avión, lo que obligó a cambiar la trayectoria del vuelo, así informaron la policía y la fiscalía de Francia.
“El sábado por la mañana, después de que lo pidiera el comandante, el avión cambió de trayectoria hacia el aeropuerto de Nantes al oeste de Francia", indicó la policía fronteriza francesa.
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El vuelo había partido de Leeds, en el norte de Inglaterra, y tenía destino hacia Alicante, en el sureste de España. El pasajero, quien reconoció la agresión sexual cometida contra la azafata, estuvo retenido en comisaría y la víctima lo denunció, así lo precisó la misma fuente.
La fiscalía de Nantes informó que el agresor ya se encuentra detenido y esperan la comparecencia ante el tribunal el próximo 13 de diciembre.
“El sospechoso, un hombre jubilado oriundo del Reino Unido, se encuentra bajo control judicial a la espera de que comparezca ante el tribunal correccional el próximo 13 de diciembre", informó la fiscalía de Nantes.
Cuando el acusado fue detenido por las fuerzas de seguridad, estaba muy alcoholizado, con unos niveles de 2.2 gramos de alcohol por litro de sangre, según el informe de la fiscalía.
Otro evento vinculado con el consumo excesivo de alcohol durante un vuelo, fue el que ocurrió en mayo después de que cinco ingleses borrachos molestaran a otros pasajeros.
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Fue un vuelo de Ryanair procedente de Manchester, Inglaterra que iba con destino a Faro, Portugal, también fue desviado al aeropuerto francés de Nantes porque cinco ingleses borrachos estaban molestando a otros pasajeros, según informó la policía de fronteras.
Según el comandante de la policía Pierre-Yves Collin los cinco ingleses, tres mujeres y dos hombres, de edades comprendidas entre los 24 y los 36 años, no debían de haber subido al avión en Inglaterra porque evidentemente habían empezado a beber vodka durante la mañana.
SCA