Luego de que se diera el intercambio de prisioneros entre el grupo Hamás y la nación de Israel, éstos comenzaron a contar cómo fue su estancia bajo esas circunstancias.
Cabe resaltar que el ‘canje’ fue que Israel liberó a 117 prisioneros palestinos, mientras que el grupo organizado Hamás dejó ir a 40 rehenes israelíes, entre los que la mayoría eran mujeres, niñas y niños.
¿Qué hacía Hamás con los rehenes?
De acuerdo a las versiones de algunos de los rehenes, principalmente los menores de edad, aseguraron que los miembros de Hamás los sometieron a algunas torturas psicológicas que consistieron de varias acciones.
Principalmente reportaron que a los niños los obligaron a ver en video las muertes y destrucción de la parte en la que llegaron los de Hamás en el territorio israelí, donde mataron a cientos de civiles y algunos soldados.
En los videos mencionaron que también les mostraron cómo irrumpían en casas y lugares públicos para seguir ocasionando caos en lo que fue un ataque directo en contra de la anción de Israel.
Entre otros de los relatos de personas más grandes que eran prisioneros de Hamás, destacaban que en los 50 días que fueron rehenes del grupo armado palestino, además de las torturas psicológicas, también les escaseaban la comida y tenían incomodidad para dormir, además que les daban rutinas monótonas.
Someten a tratamiento psiquiátrico a los liberados
Israel luego de recibir a los prisioneros que liberó Hamás, los enviaron a centros médicos para que recibieran principalmente atención a heridas o exámenes en general para valorar su estado físico.
Agregado a esto, comenzaron a tratarlos psicológicamente a todos debido a los relatos que les comenzaron a contar de su estadía en territorio palestino, por lo que comenzaron a enviarlos con especialistas para que pudieran sobrellevar mentalmente lo que vivieron.
Algunos de los menores mencionaron que siendo niños, si lloraban los de Hamás les apuntaban con rifles en la cabeza.
Una de las rehenes liberadas llamada Ruth de 78 años declaró durante una entrevista que al principio la alimentaban bien, pero después la comida comenzó a ser escasa y tuvo que dormir en sillas de plástico y una sábana durante 40 días.
De acuerdo a algunos hospitales, tienen un protocolo en el cual deben seguir en caso de una persona que precisamente viene de ser prisionera.
Una de las psicólogas que recibió a los rehenes declaró que el estado físico de la mayoría de los menores era buena, sin embargo el aspecto psicológico fue el que los afectó y deberán de tratar.
MQ