Un trabajador aeroportuario murió en Texas, Estados Unidos, después de ser succionado por el motor de un avión de pasajeros, según la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB).
El empleado murió cuando un vuelo de la aerolínea Delta llegó a la ciudad de San Antonio, Texas, procedente de Los Ángeles. Fue ahí que se dirigió al portón de embarque con un motor encendido, y poco después, la víctima fue absorbida por la maquinaría.
"La NTSB continúa recopilando información sobre el incidente", indicaron las autoridades.
El trabajador era empleado de Unifi Aviation, una empresa contratada por el gigante de las aerolíneas para sus operaciones de tierra, según medios locales.
Voceros de Delta indicaron a la emisora KENS 5, de San Antonio, que la compañía está "cooperando con las autoridades mientras comienzan su investigación". Por su parte, Unifi Aviation señaló que el incidente fue "un trágico accidente" ajeno a los procedimientos habituales de su actividad y responsabilidad del personal.
Accidentes como este no son tan extraños como parece, ya que el miércoles pasado la aerolínea regional Piedmont Airlines -una subsidiaria de American Airlines- recibió una multa de 15 mil 625 dólares por parte de la Administración de Salud y Seguridad Ocupacional (OSHA, por siglas en inglés) -otro organismo regulador-, por la muerte de un trabajador de personal de tierra el año pasado en un incidente similar.
Además, este 2023, murió también otro trabajador en circunstancias similares en Alabama. Un testigo refirió, que la víctima fue literalmente absorbida por la turbina de avión y que pertenecía a las personas que laboraban en la manipulación del equipaje.
En un comunicado del Aeropuerto Regional de Montgomery, Alabama, se lee que el accidente ocurrió aproximadamente a las 03:00 de la tarde; todo ocurrió donde estaba estacionada la aeronave Embraer E175, operada por Envoy Air y que tenía prevista su salida a las 03:51 con destino al Aeropuerto Internacional de Dallas – Fort Worth.
MRG