En Rusia no hay piedad para quienes se atreven y expresan su rechazo a la intervención militar en Ucrania. La justicia detuvo a un padre de familia porque su hija hizo en la escuela un dibujo en el que se mostró en contra de la guerra.
El papá recibió prisión por dos años debido a que desacreditó a las fuerzas armadas en varios mensajes que fueron expuestos en las redes sociales. Él no espero la sentencia y escapó durante la madrugada del arresto domiciliario en el que estaba.
El padre de familia sentensiado a prisión es Alexéi Moskaliov, padre separado de 53 años de edad; vivía con su hija Masha, de 13, en la ciudad de Yefrémov, localizada al sur de Moscú.
En abril de 2022 su vida cambió después de que el Kremlin impulsó una ley que condena a cárcel a quien critique las acciones de sus tropas contra Ucrania.
La niña María Moskaliova, Masha , durante una clase mostró un dibujo en el que aparecían misiles disparados hacia una familia junto a la bandera ucraniana y escribió “Gloria a Ucrania”; junto a los proyectiles dibujó una bandera rusa y la frase:“No a la guerra”.
El dibujo fue hecho en abril de 2022, tiempo en el que Masha Moskaleva tenía tenía 12 años de edad.
La hija de Alexéi Moskaliov fue enviada a un centro de menores luego de que autoridades investigaron sus críticas antibélicas en las redes sociales.
"La policía comenzó a investigar las redes sociales de Alexei; le dijeron que estaba criando mal a su hija".
Papá de Masha recibe multa
Por una publicación contra la guerra en sus redes sociales, Alexei recibió una multa de 32 mil rublos, lo que equivale a cerca de 415 dólares en esos momentos; el motivo de la multa fue por desacreditar a las fuerzas armadas rusas.
Además abrió una causa penal en su contra por las publicaciones contra la guerra, con la misma acusación de desacreditar al ejército.
Exigen devolver a Masha
La Comisión de Asuntos Juveniles de la ciudad de Yefremov ha tomado medidas legales para restringir de forma oficial los derechos de paternidad de Alexei.
Se trata de una audiencia inicial conocida como "una conversación" con el juez.
Su abogado, Vladimir Biliyenko, explicó que Alexei quería estar aquí en persona, pero no se le permite interrumpir su arresto domiciliario para comparecer ante los tribunales, a pesar de que está en juego la tutela de su hija.
Este caso ocurrió en Yefrémov, lugar con 37 mil habitantes y que se encuentra a 320 kilómetros al sur de Moscú, en el oblast de Tula.