ESPAÑA. — Los primeros huéspedes que estuvieron retenidos en un hotel en cuarentena en la isla española de Tenerife empezaron a salir este viernes luego de someterse a controles para detectar un nuevo coronavirus que ha infectado a miles de personas en todo el mundo.
Funcionarios de salud de Islas Canarias dijeron que 130 de los cientos de turistas aislados en el hotel H10 Costa Adeje Palace, muchos de ellos extranjeros, se marcharán en grupos.
Los huéspedes que recibieron autorización para partir llegaron al hotel el lunes, luego de que otras cuatro personas ya alojadas en el hotel dieron positivo por COVID-19, la enfermedad causada por el nuevo virus y fueron hospitalizadas.
Nadie más en las instalaciones, ni clientes ni empleados, dieron positivo por la enfermedad, dijeron las autoridades, pero otros 600 vacacionistas que seguían en el hotel, de 25 países distintos, debían completar una cuarentena por 14 días.
Reporteros en el lugar vieron lo que parecían ser trabajadores médicos, equipados con trajes de protección, tomando la temperatura a varias familias y parejas que salían del hotel.
Los examinados llevaban mascarillas y parecieron firmar documentos antes de subir a una camioneta para pasajeros cargada con maletas.
Más allá de las islas Canarias, España registró un importante repunte en el número de infectados esta semana, con un total de 30 hasta este viernes al mediodía.
Aunque la mayoría de los casos estaban ligados a un nuevo foco de coronavirus en el norte de Italia, las autoridades investigaban dónde pudieron enfermar tres de los nuevos pacientes, incluso uno de 77 años que estaba grave y que no habían viajado al extranjero.
Las autoridades dijeron que dos aficionados al fútbol y residentes de Valencia y un periodista deportivo que acompañaron al club a Milán para un partido de la Liga de Campeones contra Atalanta contrajeron el virus.
El equipo del este de España anunció este viernes que suspenderá todos los actos no deportivos en espacios cerrados, incluyendo las conferencias de prensa, que “supongan un riesgo para los jugadores, técnicos y personal del club”.
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ESPAÑA. — Los primeros huéspedes que estuvieron retenidos en un hotel en cuarentena en la isla española de Tenerife empezaron a salir este viernes luego de someterse a controles para detectar un nuevo coronavirus que ha infectado a miles de personas en todo el mundo.
Funcionarios de salud de Islas Canarias dijeron que 130 de los cientos de turistas aislados en el hotel H10 Costa Adeje Palace, muchos de ellos extranjeros, se marcharán en grupos.
Los huéspedes que recibieron autorización para partir llegaron al hotel el lunes, luego de que otras cuatro personas ya alojadas en el hotel dieron positivo por COVID-19, la enfermedad causada por el nuevo virus y fueron hospitalizadas.
Nadie más en las instalaciones, ni clientes ni empleados, dieron positivo por la enfermedad, dijeron las autoridades, pero otros 600 vacacionistas que seguían en el hotel, de 25 países distintos, debían completar una cuarentena por 14 días.
Reporteros en el lugar vieron lo que parecían ser trabajadores médicos, equipados con trajes de protección, tomando la temperatura a varias familias y parejas que salían del hotel.
Los examinados llevaban mascarillas y parecieron firmar documentos antes de subir a una camioneta para pasajeros cargada con maletas.
Más allá de las islas Canarias, España registró un importante repunte en el número de infectados esta semana, con un total de 30 hasta este viernes al mediodía.
Aunque la mayoría de los casos estaban ligados a un nuevo foco de coronavirus en el norte de Italia, las autoridades investigaban dónde pudieron enfermar tres de los nuevos pacientes, incluso uno de 77 años que estaba grave y que no habían viajado al extranjero.
Las autoridades dijeron que dos aficionados al fútbol y residentes de Valencia y un periodista deportivo que acompañaron al club a Milán para un partido de la Liga de Campeones contra Atalanta contrajeron el virus.
El equipo del este de España anunció este viernes que suspenderá todos los actos no deportivos en espacios cerrados, incluyendo las conferencias de prensa, que “supongan un riesgo para los jugadores, técnicos y personal del club”.
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