Un avión de Boeing que se dirigía desde Tampa, Florida hacia Phoenix, Arizona, se canceló después de que estallaron los neumáticos y se prendieron fuego en plena pista, el 11 de julio a las 07:30 horas.
Esto ocurrió en el vuelo AA 590 de American Airlines, y a pesar del incidente, no hubo personas heridas, además de que el avión no alcanzó a despegar.
Cabe señalar que tres días antes de lo sucedido, la Justicia norteamericana ordenó a la empresa de aviación a indemnizar a familiares 346 víctimas que murieron en 2018 y 2019, durante vuelos en los aviones 737 MAX.
Un usuario grabó un video en las inmediaciones del Aeropuerto Internacional de Tampa, en el cual se muestra que el Boeing 737 de American Airlines tomó impulso y aceleró, pero sus neumáticos se envolvieron en humo, por lo que el avión detuvo su carrera al final de la pista.
De acuerdo a como sucedió, uno de los neumáticos se prendió fuego, que después se expandió hacia otras partes del tren de aterrizaje, mientras que otros de los neumáticos estallaron.
Los 174 pasajeros y la tripulación de seis miembros fueron evacuados del avión, pero nadie resultó herido. De acuerdo al medio local Tampa Hoy, uno de los pasajeros, Sheri Blankenship, habló sobre lo sucedido.
“Abordamos el avión sin problemas, nos preparamos para rodar por la pista y la nave empezó a recorrer la pista a toda potencia. De pronto sentimos como si estuviéramos en un camino lleno de pozos, hasta que al final parecía como si el avión se hubiera topado con un bache grande en el camino”, dijo.
El mismo pasajero explicó que partes del avión estaban incendiándose cuando estaban siendo evacuados. Al contingente le tomó casi tres horas volver en autobús a la terminal para que pudieran abordar en otro avión.
Horas después, la aerolínea American Airlines compartió un comunicado para referirse a los desperfectos del vuelo AA 950.
“El vuelo 590 de American Airlines con servicio de Tampa a Phoenix experimentó un problema mecánico en la pista antes de despegar. Los pasajeros desembarcaron de forma segura y fueron llevados en ómnibus a la terminal. Jamás queremos interrumpir los planes de viaje de nuestros clientes y nos disculpamos por cualquier inconveniente que esto pudo haber causado”, indica el comunicado.
La aerolínea también ofreció la reprogramación del vuelo para los pasajeros. Este hecho es investigado por la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos.
AA