Colombo, 31 May (Notimex).- Las inundaciones y deslizamientos de tierra que afectan el sur y oeste de Sri Lanka desde el fin de semana han causado hasta hoy la muerte de 200 personas, unos 63 heridos, mientras que 96 más siguen desaparecidos.
El Centro de Gestión de Desastres (DMC, por sus siglas en inglés) de Sri Lanka actualizó este miércoles sus informes sobre los daños causados por las lluvias torrenciales que azotan gran parte del país insular desde el viernes pasado.
Según los últimos datos registrados por la dependencia cingalesa hasta las 09:00 horas locales (14:30 GMT) de este 31 de mayo se había confirmado un total de 202 muertos, 63 heridos, 96 desaparecidos, mil 505 casas totalmente destruidas y siete mil 617 más con daños parciales.
Mientras que 629 mil 742 personas, pertenecientes a 163 mil 701 familias, residente de 15 diferentes distritos, resultaron afectadas por las inundaciones, según reporte de la edición electrónica del diario Colombo Page.
El MDC destacó que las inundaciones han obligada además a un total de 77 mil432 personas, pertenecientes a 19 mil 784 familias, a permanecer en uno de los 366 albergues seguros que fueron instalados por las autoridades.
El nuevo balance de daños se dio a conocer, en medio de la llegada de la ayuda internacional y los esfuerzas de las fuerzas armadas y del personal de la Cruz Roja de Sri Lanka para llevar ayuda a los damnificados por las inundaciones, las peores en más de 14 años.
Equipos especiales de buzos y personal de la Marina India llegaron este miércoles a bordo de tres naves para apoyar a los equipos de la marina de guerra de Sri Lanka en las operaciones de socorro y rescate en Ratnapura, una las regiones más afectadas.
El ministro cingalés de Relaciones Exteriores, Ravi Karunanayake, informó este tarde que 16 países han enviado suministros de socorro y medicinas para ayudar a más de 600 mil personas que tuvieron que dejar sus hogares tras el diluvio del monzón del viernes pasado.
"También tenemos investigaciones de otros países y organizaciones que desean conocer nuestras necesidades inmediatas. Estamos conmovidos por la respuesta espontánea", indicó Karunanayake en declaraciones a la prensa en Colombo.
Sin embrago, la distribución de la ayuda se ve obstaculizada por la inaccesibilidad de los caminos, ya que muchos siguen bloqueados por la tierra y lodo de los deslaves, así como por rocas y muchos árboles que se vinieron abajo.
Pese a que desde el domingo pasado, las tropas del Ejército participan en la limpieza de los caminos, los equipos de socorro no han podido llegar a muchas zonas, debido a la inmensa dificultad que representa poder llegar con los caminos aislados o porque están muy lejos.
Además, las autoridades de Sri Lanka han emitió una serie de advertencias en varios distritos del sur y centro del país, ante la posibilidad de que haya más derrumbes, principalmente en Kegalle, Ratnapura, Galle, Matara y Kalutara.
De hecho, el secretario general de las Naciones Unidas (ONU), Antonio Guterres, dijo que estaba "profundamente preocupado” por los efectos devastadores causados en Sri Lanka y Bangladesh por las lluvias del ciclón Mora, que ha sido degradado ya a tormenta.
La mayor preocupación es que las inundaciones generen epidemias sanitarias, como el dengue, una enfermedad infecciosa que se transmite por la picadura del mosquito Aedes aegypti, que suele estar presente en el agua acumulada.
Las inundaciones son las peores que se registran en Sri Lanka desde mayo de 2003, cuando 250 personas fallecieron y 10 mil viviendas fueron destruidas a causa de las lluvias monzónicas, que afectan cada año el sureste asiático.