Un joven de 18 años fue detenido tras irrumpir el pasado martes por la tarde con un cuchillo en un instituto de Llucmajor, comunidad mallorquina en España, con la presunta intención de atacar al actual novio de su exnovia durante el receso.
El incidente, que generó gran alarma entre el alumnado y el personal del centro, terminó sin heridos, pero dejó tras de sí un amplio operativo policial y una investigación por tentativa de homicidio y amenazas graves.
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¿Cómo ocurrió el intento de asesinato?
Según la información difundida por medios locales, el joven habría permanecido varias horas en los alrededores del instituto esperando a que la víctima, también estudiante, saliera al patio durante el tiempo libre de las 19:00 horas.
En ese momento, irrumpió en las instalaciones y se dirigió directamente a la nueva pareja de su exnovia, sacando un arma blanca delante de varios testigos.
De acuerdo con estas mismas fuentes, el agresor llegó a amenazarlo de muerte claramente, diciéndole: “Te voy a apuñalar en el pecho”.
La escena provocó pánico entre los presentes, aunque la situación no llegó a escalar hasta el ataque físico gracias a la rápida intervención de otros estudiantes y personal del centro, lo que permitió que la víctima resultara completamente ilesa.
Tras el altercado, el novio de la exnovia del detenido presentó una denuncia en el cuartel de la Guardia Civil de Campos, detallando lo ocurrido.
Paralelamente, los agentes de la Policía Local de Llucmajor y la Guardia Civil ya habían sido alertados del incidente e iniciaron un dispositivo para localizar al presunto agresor.
La búsqueda culminó poco después en la Ronda de Ponent, donde los agentes identificaron y detuvieron al joven.
En ese momento, ya se había desprendido del cuchillo utilizado para las amenazas, por lo que las autoridades continúan investigando su paradero.
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El joven quedó arrestado como presunto autor de un delito de tentativa de homicidio y otro de amenazas graves.
Durante la mañana del miércoles, el detenido fue trasladado por la Guardia Civil a Vía Alemania, en Palma, para comparecer ante la magistrada del Juzgado de Instrucción número 11.
Representado por el abogado Federico Morote, el joven ejerció su derecho a no declarar. Tras la audiencia, y pese a la gravedad de los hechos imputados, quedó en libertad mientras continúa la investigación.
No obstante, sigue siendo considerado sospechoso formal de los delitos mencionados y podría enfrentarse a consecuencias judiciales significativas en caso de que se confirme su responsabilidad.
El caso continúa abierto y las autoridades trabajan en esclarecer con mayor precisión la secuencia de los hechos, así como el contexto personal que pudo motivar esta peligrosa confrontación en un entorno escolar.
AM