CIUDAD DE MÉXICO. - Luis, un ladrón de Uruguay que vivía en Barcelona, decidió cometer su último robo tras ser diagnosticado con cáncer terminal y tener sus días contados. El objetivo de este robo era dejar protegida a su familia tras su muerte.
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Tras enterarse sobre su fatal final, el hombre decidió jugarse su última carta por lo que contactó a un compañero de andanzas llamado Marcelo con quien planeó el robo a una joyería y quien además perteneció a la banda de ‘Los Dogos’, famosos entre los años 2006 y 2012 por especializarse en el robo de joyerías.
El asaltó se cometió el 6 de octubre de 2018, cuando los dos sujetos ingresaron al local ubicado en Barcelona. Ahí Luis ingresó en una silla de ruedas haciéndose pasar por una persona con discapacidad mientras era empujado por Marcelo, ambos se hicieron pasar por clientes interesados en relojes, esperaron el momento oportuno y a punta de pistola amagaron a los empelados de la joyería.
El monto de los robado ascendió a 1.3 millones de euros. Los ladrones lograron escapar a bordo de dos motocicletas que ya los esperaban afuera del establecimiento.
Marcelo utilizó el dinero para comparar una lujosa casa con jardín y mudarse ahí con su esposa e hija de 16 años, además de comprarse dos autos (Jaguar y Audi).
La policía pudo dar con los responsables del robo millonario gracias a que un día se percató de la presencia de dos sujetos sospechosos en un bar al hacerles una revisión descubrieron que uno de ellos llevaba puesto un reloj de los que habían sido robados.
Con esta y otra información lograron dar con Marcelo a quien detuvieron el 19 de noviembre junto a otras nueve personas, sin embargo, Luis no fue detenido porque meses atrás había fallecido a causa de su enfermedad.
PGG