Venezuela.- Una joven madre envenenó a sus dos hijos, un niño de 5 años y un bebé de 11 meses. Después de que perdieron la vida, la mujer hizo lo propio y terminó con la suya.
Los hechos se dieron en la comunidad indígena La Canoa en el municipio Independencia al sur de Anzoátegui, a pocos kilómetros del estado Bolívar en Venezuela.
La madre de la joven, y abuela de los pequeños, fue quien encontró los cadáveres dentro de esta casa, luego de que su hija no la visitara y ella se preocupara tanto por su hija como por sus nietos.
Al llegar al domicilio, la abuela se percató que todo se mantenía cerrado, por lo que tuvo que forzar la cerradura para poder ingresar a la casa. Fue entonces cuando dentro de una habitación encontró los cuerpos con espuma en la boca.
En la cocina había restos de yuca amarga, misma que se especula les dio a los menores para quitarles la vida.
Hasta el momento no se ha comprado alguna hipótesis, sin embargo, todo parece apuntar a que la madre fue la culpable del homicidio.