Alrededor de 12 mil personas participaron hoy en una manifestación en Berlín para lanzar una señal contra el odio, el racismo y el extremismo de derecha, porque el martes entra al Parlamento la nueva fracción legislativa del partido de extrema derecha, Alternativa para Alemania (AfD).
Las estimaciones de los organizadores resultaron superadas y coincidieron con el conteo de manifestantes hecho por la policía berlinesa. La marcha que partió de la Puerta de Brandenburgo hacia el Reichstag, el edificio donde sesiona el Parlamento alemán, se realizó sin incidentes.
El iniciador de la manifestación, Ali Can, declaró que la historia ha enseñado a los alemanes a dónde pueden conducir el odio y el racismo.
“Demando a todos los legisladores (alemanes) a apoyar y expresarse en favor de nuestros valores democráticos”.
El próximo martes se constituirá el nuevo Bundestag, surgido de las elecciones del 24 de septiembre, y por primera vez desde la caída del nazismo un partido de extrema derecha y tintes neonazis formará parte del cuerpo legislativo con fracción parlamentaria.
El partido alemán AfD, en cambio, calificó la manifestación de ser un atentado contra la democracia.
El presidente de la fracción legislativa de los Verdes en el Bundestag, Anton Hofreiter, declaró al inicio de la manifestación que la misma era una valiosa señal de que la gente no acepta en el Bundestag un partido que hizo una campaña electoral en la que se expresó en forma racista y radical de derecha.
Alemania desató la Segunda Guerra Mundial con el partido nazi de Adolfo Hitler a la cabeza, por razones expansionistas y racistas, con el objetivo de imponer la cultura alemana al mundo. 40 millones de personas perdieron la vida a causa de esa conflagración.
El partido AfD formará ahora parte del parlamento alemán y será la primera vez que un partido de extrema derecha ocupa la posición de la tercera mayor fuerza política de ese cuerpo legislativo.